Mensaje de pobrecito

La fábrica de humo

Miguel Ángel Chazarri 20/06/2017

No me gusta, qué quieren que les diga. El mensaje transmitido en la campaña de abonos del Betis es victimista, de asumir la mediocridad porque sí, porque así es la vida. Qué le vamos a hacer... "No ganamos un partido ni en la campaña de abonos", leía a un ingenioso tuitero. Es verdad, ni en la campaña veraniega se percibe un nuevo aire, ilusiones regeneradas, energía ganadora, un recuerdo cariñoso y obligado al pasado victorioso, que también lo ha habido... Siempre desconfío de los hombres de marketing. Este año lo tenían fácil: Lorenzo Serra Ferrer y su aura ganadora. Pero no, otra vez vuelta a ese Betis que se atribuye la capacidad de entender la vida de una forma especial. Al Betis que pierde porque la vida es dura y no porque su clase dirigente no da una a derechas. Sí, ya sé que en la campaña se habla del esfuerzo y la lucha. Hombre, ya lo que faltaba es que nadie corra, que nadie trabaje...

Creo que de la derrota se aprende muy poco. Ya ven para qué le sirve al Betis perder y perder. Eso de caerse y volverse a levantar está muy sobrevalorado. No es más que un consuelo posiblemente necesario, pero vacío. Si no se pierde el norte, la victoria enseña mucho más. Ganar trae ganar. En el caso del Betis, su 'establishment' sigue encantado de conocerse y hurgando en el supuesto lado romántico de la fatalidad. Fatalidad que no es tal, que es simple y llanamente torpeza. Muy posiblemente este Betis pobrecito de la campaña sea el más cómodo para ellos. Pero en pleno 2017, y con el Sevilla disparado, no es nada actual ni competitivo. Serra, usted debe poner el remedio. No escuche y siga.