muchodeporte.com : Miguel Ángel Chazarri

Un triunfo con el piloto automático

La fábrica de humo
Miguel Ángel Chazarri
Miguel Ángel Chazarri
09/09/2017

Uno de los beneficios de adquirir grandeza es que dicho estatus se huele. A veces, no siempre, los rivales no se atreven, no se sabe bien si porque se arrugan o porque efectivamente el equipo superior hace más cosas buenas de las que parece en el campo. Habrá un poco de todo, digo yo. Ese aura tuvo el partido ante el Eibar. ¿Jugó bien el Sevilla? Bajo mi punto de vista, no. Le sigue faltando un hervor al equipo de Berizzo, a veces demasiado plano, a veces en el alambre, con la sensación de que le pueden meter mano. Ello no ocurrió porque este Eibar no se pareció en nada al de la temporada pasada. Aquel sí pasó por el Sánchez-Pizjuán con garbo. Éste ni tiró a puerta. Marchó al País Vasco con una derrota justa. El Sevilla, sin mucha continuidad, sí fue agolpando ocasiones claras. Tres en la primera parte. Nada más comenzar la segunda mitad, Ganso, el nuevo hombre gol, abrió el marcador. Jugó bien el brasileño. Se va ganando valoraciones sobre su rendimiento más relajadas, creo. Aporta, pone de gol y ahora encima hasta marca. No sé qué ha hecho mal este futbolista para que muchos estén permanentemente en guardia con él. ¿Que jugó mal en Getafe? Sí, pero ¿peor que quién? Y él sí ganó el partido.

Con el 1-0 tampoco hubo control del juego. Me da la impresión de que el equipo sigue muy abierto. Veo a los jugadores muy separados los unos de los otros. El Eibar manejó la pelota, aunque sin peligro alguno. Le faltó cintura a Berizzo con los cambios. Hasta el minuto 73 no movió el banquillo. Y de forma obligada: Corchia, para mí mejor que Mercado, por el argentino. Pero cuando en el campo hay muchos millones de euros, lo normal es que alguien termine poniendo la tranquilidad. Fueron, en este caso, Ben Yedder y Nolito. El Sevilla se va colocando arriba, en una posición bonita. Eso es lo que más vale, aunque me gusta poco cómo juega. 

 


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