muchodeporte.com : Víctor Fernández

Un pacto que retrata a todos

Me levanto y me voy
Víctor Fernández
Víctor Fernández
31/07/2017

Dentro de unos años, cuando la verdad aclare la intencionada confusión creada para maniobrar libremente entre la niebla, se hablará de julio de 2017 como durante décadas hablamos del famoso 92 de Ruiz de Lopera. La aparente transfusión sanguínea que el Betis recibió la pasada semana con el trasvase del 51 por ciento de las acciones, por fin, ha dejado al descubierto a todos.

El pacto retrató a todos los actores. A Ángel Haro, cuyo papel intrascendente le permitió ausentarse de la firma histórica y de una semana de trabajo intenso de planificación para irse de… vacaciones. Es un presidente de cartón piedra en manos de Adolfo Cuéllar, Borbolla y la Liga de Juristas béticos, que son los que mandan en el club desde hace años. El poder de este grupo quedó patente la semana pasada. El papel secundario de López Catalán también se realzó. Ni pincha ni corta, sólo cumple órdenes del entorno. El pacto reafirmó también el egoísmo de Ruiz de Lopera, que volvió a dejar en la cuneta a sus seguidores. Nunca le importó el Betis ni que le hayan llamado ladrón, sólo se mueve por la pasta. El acuerdo destaca a Oliver como el listo de la clase. Se ha reído de todo el mundo y se marcha con los bolsillos llenos. En su día unos pocos advertimos de la fuerza de su apuesta y nos llamaron tontos. Que usted disfrute el dinero ganado gracias a la idiocia del respetable. Y, por supuesto, el acuerdo deja en entredicho a la justicia, que impuso sobre Lopera instrucciones gigantescas y amenazadoras y ahora parece decidida a cerrar los ojos y olvidar los presuntos latrocinios.

Pero el acuerdo final también retrata a algunas de las plataformas, a PNB y su estilete Pepe Tirado, que nacieron para luchar y acabaron entregadas al juego del poder, y, sin embargo, le ha dado brillo a la dignidad de tipos honrosos como Hugo Galera y Emilio Soto. El ex presidente ha calificado esta operación “de guante blanco” y ha denunciado que el objetivo es que unos pocos se queden con el Betis. Todos le han dado la espalda. A Manolo Castaño lo deja en su sitio: alguien que pudo cometer errores pero que le ha dedicado su vida y su dinero al Betis. El número de su carnet comparado con el de los que quieren mandar ahora refuerza su historial. Todo bajo la pasiva mirada de la afición, que deja correr el agua... Como en el 92.

 


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