Real Betis BalompiéTímidos pasos para un consejo de consenso
Las plataformas, favorables a que los actuales dirigentes abandonen la entidad cuanto antes
 Redacción 23/04/2014 |
Nadie sabe lo que pasará dentro de diez minutos en el Betis. La situación de provisionalidad es absoluta y la falta de capacidad de los actuales dirigentes, monumental. De ahí que se estén produciendo tímidos movimientos para dar paso a un consejo de consenso, que sería también provisional, pero al menos más coherente que el actual, desligitimado por completo.
Una vez más, la importancia de las plataformas volverá a ser capital. Cada una con su perfil, todas están en guardia, esperando algún movimiento, encuentro, reunión, diálogo o gesto de Francisco Estepa. El papel del administrador judicial en la última junta se vio claramente: levantar la mano en contra de todo lo que planteó PNB, el grupo más crítico con la gestión actual. Diario de Sevilla informa de que PNB incluso podría pedir la remoción de Estepa y solicitar a la jueza Alaya que ponga al frente a otro administrador. A ser posible, bético y con algún conocimiento de fútbol.
Las otras aguardan. Quieren ver si los actuales dirigentes pretenden de verdad seguir al frente, apoltronarse en el poder, cosa que no habría que descartar. BPV espera una reunión con Estepa y que el administrador dé cabida a otro tipo de gente en el consejo. La Liga de Juristas Béticos va a un son parecido, pero al mismo tiempo sí tiene más vinculo con el club. Ellos sí son 'susurradores' de Estepa.
El consenso que se plantea desde diversos frentes pincha en hueso cuando llega la hora de verse las caras con Castaño. La distancia del abogado con las plataformas es total. Sigue estando muy mal visto porque en su día no es que apoyara a Lopera, cosa que hasta se podría entender, sino que además se alió con Luis Oliver. Aún no ha recibido, ni recibirá, el 'perdón' de la masa. Pero ojo, la realidad también indica que Castaño, igual o más bético que los que pleitean con Lopera, es el segundo máximo accionista de la entidad, no para de comprar acciones y tiene más conocimiento de fútbol que todos los que están en el consejo. Castaño es un proscrito y los que están, unos incompetentes. ¿Qué es peor?
Para el cambio necesario que se persigue no hay que perder de vista el papel de la grada. Hasta ahora el bético no sólo ha callado, sino que ha aplaudido. Se supone que dicha actitud cambiará el sábado, posiblemente con el descenso matemático consumado. Un fuerte clima crítico contra el palco ayudará a reorganizar la entidad. Lo que se intenta a toda costa es que los que mandan se vayan cuanto antes y no planifiquen nada. La situación es muy preocupante. Este toro apunta a la femoral. Hay temor a que el Betis se instale cruelmente en Segunda División o de incluso algo peor si siguen mandando los mismos.