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0-5: De la solidez al ridículo

El Betis, bien plantado en la primera mitad, deja huecos en la segunda y sucumbe ante el poderío de Messi

Miguel Ángel Chazarri
Miguel Ángel Chazarri
21/01/2018

No pintaba mal el partido al descanso. El Barça estaba incómodo, Messi no entraba demasiado en juego. No había ni un solo futbolista blaugrana que destacara especialmente, que teniendo en cuenta lo que se tenía enfrente, no es poca cosa. Pero de una versión sólida más que aceptable durante una hora, con el Barça al ralentí, todo sea dicho, se pasó a la verbena. La segunda parte fue espantosa, impropia de un equipo de cierto nivel. En lugar de seguir con el mismo plan, el Betis se descuidó, se desprotegió. Y una vez que entró el primero, se abrió el carro. Rakitic marcó el primer gol y ya el Betis no reaccionó. El equipo fue mal a la presión en el tanto del croata y el Barça tocó en paredes sin oposición hasta que Rakitic se quedó solo y definió. Llegó la depresión. Ya no hubo Betis y sí Messi, mucho Messi. El mejor futbolista de todos los tiempos tuvo sesión de baño y masaje en el Villamarín. Marcó, asistió, repartió... Qué escándalo. Cinco goles en la segunda parte. Qué horror...

El resultado deja mal cuerpo. Por la derrota, por supuesto, y por lo abultada de la misma viendo las prestaciones del equipo en la primera mitad. Para empezar, Setién pareció tener un plan. Después de un 0-5 suena a broma tal afirmación, pero es que realmente durante una hora fue así. El técnico incrustó a Javi García atrás. Joaquín pasó al centro para presionar a Busquets. El atosigamiento al rival, muy arriba, para incomodarle. Incluso arriba estuvo animado. Tiró Guardado en el minuto 2, Joaquín en el minuto once... El Barça apenas llegaba. Sólo una clara ocasión de Sergi Roberto y un disparo al lateral a la red de Messi, que por entonces calentaba para la segunda parte. Todo fue muy igualado, la pelota corría por las zonas donde no se crea peligro. La perdía un centrocampista del Betis y tampoco el Barça daba profundidad a su sinfonía. No encontraba a su faro.

Así que había razones para ser optimistas. La maquinaria se heló cuando Rakitic marcó el primero. No se debió caer en el desplome colectivo, pero fue así. Todo el equipo avanzó metros. Eso sí, llegando tarde a todo. Un regalito para el Barça, que tocó y progresó hasta dejar solo a Rakitic. Gol y manita de camino. El impacto anímico de esa jugada fue brutal. Ya el Betis no se levantó. Y el Barça, como grande que es, olió la sangre y machacó. Tres goles en once minutos. Uno detrás de otro. El Betis deambulaba por el campo sin respuesta, que ésa es otra. Si Setién habla de un 6-6, podrá gustar más o menos, pero es su plan. No engaña a nadie. Pero es que las ocasiones sobre la portería de Ter Stegen fueron dos, las dos oportunidades relatadas anteriormente. Y ello siendo generosos. En parte, la ceguera arriba se debió  al gran entrenador que es Ernesto Valverde. Tiene a su equipo perfectamente ordenado. Y como arriba hay lo que hay... Ya con todo a favor, llegó el show de Messi. Con los puntos perdidos, sólo quedó recrearse viendo las acciones del crack y rezar para que el partido terminara pronto. Quedó 0-5 como pudo quedar 0-8 si el Barça aprieta. La sangría atrás no cesa. 41 goles en contra lleva el Betis. Setién no se da por vencido. Sigue tan feliz.

 

Ficha técnica:

 

Real Betis (0): Adán, Francis, Mandi, Feddal, Durmisi, Javi García (Boudebouz, minuto 77), Guardado, Fabián (Camarasa, minuto 87), Joaquín, Tello y Sergio León (Rubén Castro, minuto 72).

FC Barcelona (5): Ter Stegen, Semedo, Piqué, Vermaelen (Umtiti, minuto 44), Jordi Alba, Sergio Busquets (Deulofeu, minuto 82), Rakitic, Sergio Roberto, André Gomes (Paulinho, minuto 65), Messi y Luis Suárez.

Goles: 0-1, minuto 58: Rakitic. 0-2, minuto 64: Messi. 0-3, minuto 69: Luis Suárez. 0-4, minuto 80: Messi. 0-5, minuto 89: Luis Suárez.

Árbitro: Jaime Latre, aragonés. Amarillas para André Gomes, Durmisi, Feddal y Luis Suárez.