Los inversores prefieren al grupo de Castro que a Del Nido

El fondo que anda detrás de una adquisición relevante de títulos no pretende un control absoluto de la entidad

Paco Cepeda 21/06/2017

Es tiempo de fichajes y de rumores de balón, pero en el Sevilla pasan muchas más cosas. Los accionistas principales quieren hablar muy poco de este asunto públicamente, porque saben que el tema, cuando se desate por derecho, va a ser muy polémico por la idiosincrasia del club y de los sevillistas en general, pero la venta de un paquete de acciones importante (en torno a un 30%) se sigue cociendo a fuego lento. Llevan meses, casi años, en ello. Al Sevilla se le acerca un fondo inglés, a través de José María del Nido Júnior, que dice representar a un inversor chino. Lleva razón el presidente Pepe Castro cuando dice, las pocas veces que ha hablado de ello, que sólo son proposiciones que se escuchan sin poco más que decir. Eso es verdad, porque entre otras cosas, aunque se habla de muchas cosas incluido el precio, no se han pedido todos los papeles ni se han solicitado las auditorías que se suelen encargar cuando la cosa se pone seria de verdad en una compra de esta dimensión. Pero lo que podemos asegurar desde muchodeporte.com es que hay muchos de los accionistas principales que están muy pendientes de una operación que tiene ya algunas primeras conclusiones sobre la mesa de trabajo. 

Primero, el grupo inversor, curiosamente, no quiere el control, quiere un máximo de un 30%, y, eso sí, utilizar el nombre del Sevilla como ariete para el negocio del fútbol en su país. En China se prevé que la televisión, que busca contenidos que se emitan a nivel nacional, va a apostar por el fútbol cada vez más como formato para llegar a los consumidores de todo el país, con una población que asusta en número, y por eso quieren llegar a su mercado con el aval de empresas europeas que son referentes en el sector. Ésa es una primera mala-buena noticia, porque con un 30%, y siempre la amenaza de que a poco que compren más, se quedan con el club, al menos no lo harían de un golpe. 

Lo segundo es que ofrecen 90 millones de euros por ese 30%, y que como se han puesto las cosas entre accionistas, han negociado tanto con el grupo de Castro, compuesto por el propio presidente, Paco Guijarro, Roberto Alés y Rafael Carrión, como con José María del Nido, que en esas charlas se atribuye las acciones de Jesús León, y las que compró a González de Caldas y a Martín Baena. José Gómez Miñán no estaría definido de momento ni en un grupo ni en otro.

Con este panorama, el inversor prefiere la compra al grupo de Castro, por varios motivos de peso. Primero, porque la venta sería a los señores que ahora mandan, a los que dejarían en sus puestos como ejecutivos, para dejarlo todo igual o casi igual, algo que les conviene y mucho para hacer el ruido mínimo en algo que la afición va a estar muy pendiente. Y segundo, porque las acciones de Castro, Alés, Guijarro y Carrión están muy claritas, inscritas y controladas, y las del grupo de Del Nido andan con algunos problemas de titularidad. De momento, Jesús León las mantiene a su nombre en el libro de accionistas, y aseguran que Del Nido no ha pagado del todo ni a González de Caldas ni a Martín Baena, y que además no puede hacerlo a corto plazo, así que todo lo que dice que tiene no está controlado. Lógicamente, si al final hay venta, muy probable, y Del Nido se queda fuera, hará bandera de la no venta, de quedarse como bastión, junto a los pequeños accionistas, de un Sevilla de sevillistas, y no le faltará razón, pero a día de hoy tiene las mismas ganas o más que otros muchos de pegar un pelotazo que en su caso, si resuelve todos los problemas que arrastran sus acciones, estaríamos hablando de unos 90 millones de euros.