El partido en números

Paco Cepeda 18/11/2017

La efectividad volvió a marcar un partido, en este caso plagado de ocasiones claras, pese a no tener tanto juego. El Sevilla tuvo algo más de puntería, un poco más, lo justo para darle el triunfo. Sobre todo Franco Vázquez y Maxi Gómez tuvieron el partido en sus pies. Y pese a que el uruguayo hizo un gol, fallando otros más claros, y que el argentino sevillista no hizo ninguno, sus companeros sí pudieron subsanar sus numerosas pifias.

Dos fallones muy fallones. Vaya día de Franco Vázquez y Maxi Gómez. El céltiña metió el más difícil, pero falló una ocasiones tremendas. El sevillista tiró hasta cuatro veces, la mitad que todo el Sevilla en la primera mitad, y en situaciones de gol, pero no atinó en ninguna. Ambos tiraron las mismas veces, cuatro, con una efectividad muy baja, sobre todo el argentino, claro. En el total de equipo, el Sevilla hizo un tiro más que su rival (12-11).

Asistentes. Fue un día de centradores, no porque hubiera muchos pases, sino porque resultaron decisivos. El mejor de la Liga, Pione Sisto, dio uno más, casi lo esperado. Sarabia, en el Sevilla, es uno de los hombres más destacados en esa faceta y cumplió también con un gran centro. Y el inesperado actor, porque no jugada apenas, fue Geis. Venía de Alemania con buena fama en esa faceta, y ayer lo demostró. 

Posesión muy repartida. Son dos equipos que aspiran a tener el balón. Hay una diferencia, al menos en este partido, el Sevilla lo ha utilizado más para defenderse, con triangulaciones para dejar pasar el tiempo, y el Celta  buscaba más la verticalidad cuando tenía el balón. Al final, en cuento a porcentaje, el Sevilla tuvo un 51% del tiempo el balón. El Celta, lógicamente, el 49% restante. 

Los bloqueos. El Celta, sus jugadores, estuvieron mucho más atentos a taponar tanto los tiros como los centros de los jugadores sevillistas. Especialmente Franco Vázquez sufrió ese puntito extra para llegar a tapar la acción ofensiva. El Celta bloqueó 15 balones sevillistas, entre disparos a puerta y centros, mientras que el Sevilla sólo ocho.