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5-0: Nzonzi se parte de la risa

Un Sevilla a la deriva y más blando que nunca le permite el recital a un Madrid con muchas bajas

Paco Cepeda
Paco Cepeda
09/12/2017

In-jus-ti-fi-ca-ble. Achraf, Nacho, Vallejo, Marcelo, la defensa del Real Madrid, parte de un equipo que no deja de ser el Real Madrid pero que estaba sufriendo en todos los campos de España en el último mes y medio, incluido el suyo. En el otro lado, un Sevilla pletórico de moral, que no de juego, y con el tremendo acicate de aspirar a lograr la victoria 1.000 en Primera división. Estas y algunas cosas más invitaban a imaginar a un Sevilla competitivo y como mínimo muy incómodo para ese equipo que tantísimo coraje le da a todos los sevillistas. Pero nueva goleada. Y nuevo ridículo, el mayor. Y ojo, que ya van varios, pese a esa clasificación Champions, ese quinto puesto en Liga y seguir en la Copa y con visos de seguir progresando. Y es que hubo una dimisión generalizada de todo un equipo de fútbol llamado Sevilla FC en un día tan señalaíto. Salven un poco por vergüenza a Jesús Navas, quien mucho me temo ha adelantado la vejez futbolística sin que parezca que sea siquiera un problema de físico, sino de mente. Pero no me voy a extender en la crítica sobre el más digno de los jugadores que ayer se pusieron esa camiseta roja con la que se han logrado cosas muy importantes y que hoy se ha manchado.   

El señor Marcucci, o Berizzo, o ambos, decidieron rotar en ataque, se supone que para poner en aprietos a la defensa más atípica que yo le recuerdo al Madrid desde la época en blanco y negro. Y en los primeros compases, posiblemente hasta el segundo tanto madridista, se vio a dos equipos blandos con narices, que no hacían ni faltas, sobre todo el Sevilla (cero), llegando con tremendad facilidad a las áreas, y castigando por supuesto al más endeble de los dos, el equipo que si tiene un defecto grueso, que tiene más, es su falta de dominio de las áreas. El Madrid agradeció esa forma de jugar, pero sobre todo esa indolencia, esa rendición, y se hartó de meter goles, y repito, jugando al 25%. Porque el Sevilla, además de todo lo dicho, no le puso ni la mínima cantidad que se despacha de decoro y dignidad torera. Si hemos criticado, y me temo que tendremos que hacerlo de forma crónica, a esa defensa de bizcocho y a esa delantera que no asusta a nadie (a altos niveles, nos referimos), pues ayer se sumó al desastre un centro del campo que estará provocando la carcajada más tremenda de Nzonzi, que si ha visto el partido no se explicará nada de nada. A ese nivel de Pizarro, Banega y Mudo, se estará muriendo de rabia hasta el medio centro suplente del Sevilla C de Paquito Gallardo. Vaya petardo tan tremendo. En 45 minutos, Cristiano metía los mismos goles que en toda la temporada liguera. En 45 minutos, el Sevilla tiró por tierra muchas más cosas de las que pueda parecer si miramos su clasificación y logros. Fue de auténtica vergüenza y de toma de decisiones en caliente, porque ya se dejaron pasar los partiditos de Moscú, Valencia, Bilbao, Barcelona... siendo menos dolorosos que éste, pero muy significativos y premonitorios. 

Con esa facilidad que asusta, con esa sensación de haber hecho el canelo casi de principio a fin, el Sevilla se retiró a la caseta. No sabemos, por ahora, qué pasaría en el vestuario, no sabemos si el cuerpo técnico se ve con autoridad para decir lo que había que decir, pero entiendo yo que se castigó a todo el mundo sin hacer ni un solo cambio. Eso también es un castigo, no todo es apartar al mejor futbolista. Y en la segunda mitad, a Dios gracias, el Real Madrid se apiadó, Zidane sentó a Cristiano, y con el hambre satisfecho, los dos equipos, con sus cambios por cambiar, dejaron pasar los minutos para firmar ese tremendo ridículo que no es de destitución porque el entrenador no está.

FICHA TÉCNICA:

Real Madrid (5): Keylor Navas, Achraf, Vallejo, Nacho, Marcelo, Lucas Vázquez, Kroos (Marcos Llorente, minuto 63), Modric (Dani Ceballos, minuto 70), Asencio, Cristiano Ronaldo (Isco, minuto 75) y Benzema.

Sevilla FC (0): Sergio Rico, Mercado, Kjaer, Lenglet, Carole, Pizarro, Banega (Krohn-Dehli, minuto 80), ‘Mudo’ Vázquez (Geis, minuto 71), Jesús Navas, Nolito (Sarabia, minuto 56) y Muriel.

Goles: 1-0, minuto 2: Nacho. 2-0, minut0 22: Cristiano Ronaldo. 3-0, minuto 31: Cristiano Ronaldo. 4-0, minuto 38: Kroos. 5-0, minuto 42: Achraf.

Árbitro: Martínez Munuera, valenciano. Amarillas para Jesús Navas y Banega.