Mismo juego, pero con pasión

Vía de Escape

Paco Cepeda 19/12/2021

El Sevilla FC se está saliendo en la clasificación. Real Madrid al margen, que tiene toda la cara de campeonar con relativa facilidad, el equipo de Julen Lopetegui es el equipo con más puntos y con la bola extra del partido ante el FC Barcelona en la recámara. Olvidar estos números parciales, estos logros actuales, es absurdo, y además no lleva más que al error, porque los puntos son los que se miran para clasificar a los equipos. Pero hasta a los resultadistas empedernidos, al menos en mi caso, no nos entra en la cabeza que el equipo que sufre como un perro callejero en Córdoba o Andratx, luego sea capaz de ganar ante Villarreal, Athletic y Atlético de Madrid, parte de la nobleza de la Liga. Juega igual ante un equipo de regional que frente al campeón de la Liga, pero al final pasa lo que quiere Julen Lopetegui. Muchas veces es insoportable ese dominio del balón para no hacer nada, seguro que influye en parte en la baja asistencia de espectadores en el Sánchez-Pizjuán, pero cuando tantas veces se gana jugando de esa forma habrá que darle la razón al entrenador. 

Desde luego que cuando el rival es inferior, la cosa se lleva peor. Se juega igual que ante el Real Madrid o el Atlético, pero sin pasión. Y este equipo, sin esa pasión contagiosa, no es nada. Por eso aburre tanto cuando hay poco en juego, cuando el rival es menor. Por eso engancha cuando no se rinde y resiste ante equipos objetivamente con más efectivos y de más calidad. Todo eso se fabrica en el vestuario, donde manda Lopetegui, pero con la aportación de Monchi, que es mucho mejor como conductor de grupos que como descubridor de talentos. Pueden lesionarse ocho o nueve, que no es un problema menor, pero lo que no puede faltar es la pasión. El Sevilla la siembra y muchas veces la recoge.