Los trece de Lopetegui

La tregua

Lucas Haurie 27/06/2020

 Julen Lopetegui, que no es lo que se dice un fanático de alinear a chicos del filial, cuenta con veintiún futbolistas profesionales para el maratón de once partidos en menos de seis semanas al que ha obligado, para acabar la Liga, la pandemia. (La sexta final de Liga Europa, en agosto, conllevaría cuatro duelos en una quincena.) Los dos suplentes de Vaclik, el inquietante Bono y el casi inédito Javi Díaz, reducen el elenco a diecinueve. Restado Rony Lopes, que el pobre chaval causa ya más hilaridad que enfado entre los hinchas, nos ponemos en dieciocho, entre los que sobrevive para una emergencia un Sergi Gómez descartado el verano pasado (17). Los dos fichajes invernales, Suso y En-Nesyri, son por ahora operaciones fallidas que reducen la nómina de fiables a quince, y eso manteniendo en la lista al Mudo Vázquez, cuya actuación más descollante en los últimos ratitos que ha deparado fue la autoexpulsión que Pizarro Gómez le perdonó. Quedan catorce, entre ellos ese Gudelj tan alabado por los decantadores de fútbol para sibaritas y los perceptores de sutiles matices tácticos, pero al que su entrenador ha sacado de titular en sólo cinco partidos de Liga con un balance de seis puntos que empeora el nada honorable 7/15 que presenta el equipo desde el final del confinamiento. En trece hombres se apoya, por tanto, Lopetegui: nueve de ellos indiscutibles –el fabuloso De Jong, el saliente Banega, el achacoso Fernando, el guadianesco Munir…– y otros cuatro, colleras intercambiables en el lateral zurdo (Escudero-Reguilón) y en el centro del campo (Jordán-Óliver) que apenas oscilan, puntito arriba a veces y puntito abajo en ocasiones, sobre la línea de lo correcto. Si queda tercero, o sea, que le erijan una estatua. Si salva la séptima plaza, habrá completado una meritoria campaña.