Inadmisible hasta ganando
La fábrica de humo
Miguel Ángel Chazarri 01/03/2020 |
Qué disparate de Sevilla... Qué partido más lamentable... Pocas veces habrá levantado un triunfo tantas carencias, todas expuestas cual florecitas que brotan en la primavera. La que lio el Sevilla, con 2-0 a su favor, para ganarle a un Osasuna con uno menos. Estaba el partido para el 4-0, para que hasta el Mudo, Rony y De Jong, vaya tres elementos, se dieran un pequeño festín, que ya luego los periodistas, al calor de un sonado triunfo, nos hubiéramos encargado de decir que ciertos jugadores se enchufan. Pero no. En lugar de seguir jugando, apretando y pisando el área, el equipo se fue desconectado hasta dejar el encuentro abierto, sin control alguno. Que ésa es otra. Se dice con alegría que Lopetegui juega a marcar y a controlar la situación. ¿Qué situación controla el Sevilla? El Alavés se puso por delante en el marcador. El Espanyol empató y remontó. El Cluj se fue de Nervión con cuatro o cinco ocasiones claras. Osasuna igualó un 2-0. No, el Sevilla de Lopetegui no controla nada. Sólo lo hace en contadas ocasiones. Y, claro, Osasuna, que ya no tenía nada que perder, y al ralentí, fue atacando sin querer molestar mucho. Empató el partido. Tremendo. Ni VAR ni historias. Tremendo.
El Sevilla ni se había acercado a la portería contraria en toda la segunda parte. De repente, se veía con el partido igualado y con una grada que una vez más le dejó claro a Lopetegui que así no. Conviene que se entere el entrenador, que seguramente se preguntará de forma despistada qué más quiere la gente, que lo mismo diseña un plan ultradefensivo que pone al Mudo, Óliver y Rony en el once. Sólo salvo de este desastre con victoria a Koundé -buen partido y salto espectacular en la jugada del tercer gol-, por supuesto a En Nesyri, que cumplió con el único trabajo que vale del delantero, el gol, y a Óliver, centrocampista con el que hay que contar. Los demás, todos a taparse, aunque la verdad, bien mirado, es un milagro que el Sevilla esté tan arriba con tan poco nivel en el banquillo y tan poco nivel en la mayoría de los jugadores de la plantilla. ¿Se dieron cuenta del salto con la coronilla de De Jong en una posición franca para rematar? Dios mío de mi vida…
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