muchodeporte.com : Víctor Fernández

El Sevilla se aburre de sí mismo

Me levanto y me voy
Víctor Fernández
Víctor Fernández
19/09/2021

Visto lo visto, uno se atreve ya a lanzar esta pregunta: ¿Está el Sevilla viviendo en un engaño? Los tres empates consecutivos permiten a algunos refugiarse en la capacidad meritoria que tiene el equipo para esquivar la derrota. Pero, ¿no es ese análisis engañoso? Este equipo no está confeccionado para elogiar los empates tras decepcionantes actuaciones. Todo lo contrario, su ideario debería basarse en lamentar cada ocasión perdida y cada empate labrado a pulso por su mal juego. Quizá los empates estén ocultando el engaño o, quién sabe, frenando engañosas críticas. El tiempo lo dirá. Un tiempo que aparece a la vuelta de la esquina con la visita del Valencia.

El Sevilla empieza a aburrirse de su propia sombra, eso sí es peligroso. Cuando pasas de utilizar el verbo "vivir" por "sobrevivir" la caída es inminente. El que sobrevive sabe que transita sobre un precipicio inestable. El ritmito de este Sevilla invita a pensar que la caja de truenos puede destaparse en cualquier momento.

El diagnóstico es muy claro: el Sevilla no juega un pimiento. De los motivos se deberá ocupar Lopetegui. Desde luego, la recuperación inmediata no parece pasar por el bajísimo nivel de Navas, Rakitic, Papu y Jordán. El caso del croata se ha convertido en un problema. A día de hoy no está para jugar. ¿Mañana? Ya veremos. El equipo parece lastrado, sin fuerza, sin espíritu ni posibilidades. No intenta nada y sus registros son raquíticos. Un tiro a puerta en todo el encuentro invita a la reflexión. Es cierto que este Sevilla de Lopetegui nunca sorprendió con fuegos artificiales, pero cambiaba la imagen por la seriedad y la efectividad, dos virtudes que han desaparecido. No parece muy serio regalar tantos penaltis a los rivales ni efectivo no probar jamás al portero rival. El equipo ha pasado de buscar la victoria hasta el final a firmar los empates descaradamente. Hay motivos para pensar que este arranque de la temporada es engañoso, pero no olviden que el desengaño vital puede estar siempre rondando en la próxima esquina.  


muchodeporte.com Más Artículos
  •  

    El guardián de los sueños

    · Víctor Fernández

    Los periodos de convalecencia te enriquecen. Calma, no les soltaré otro ladrillazo sobre ese término tan...

  •  

    Empobrecimiento

    · Víctor Fernández

    Cuando lean esta pieza, posiblemente el derbi ya se habrá disputado y otro puñado de acontecimientos habrán disparado los debates hacia otro lado. Se...

  •  

    El paso de Djokovic

    · Víctor Fernández

    Dos años después aún no nos hemos enterado de qué va esto. La “pandemia” ha confirmado la decadencia de Occidente, la...

  •  

    El común sinsentido

    · Víctor Fernández

    Gilbert Keith Chesterton, escritor, ensayista, filosófo y polemista británico y católico, dijo que "una sociedad está en decadencia cuando el...

  •  

    Soldados de Rodríguez

    · Víctor Fernández

    La batalla que se llevó a cabo en el año 480 a.c. en el desfiladero de las Termópilas entre los espartanos y el imperio persa se pone siempre como...

  •  

    Los Dioses hablan

    · Víctor Fernández

    Hablábamos el otro día de las señales. De algo que chirría en el Sevilla y que no transmite buenas sensaciones. Algunos han querido mitigar el...

  •  

    Noche oscura del alma

    · Víctor Fernández

    Se puede morir de éxito. El Sevilla, ni mucho menos, murió en Salzburgo, pero ciertas señales invitan a reflexionar sobre el asunto. (Léase...

  •  

    Vueltas en círculos

    · Víctor Fernández

    Se lo leí alguna vez a Eduardo Galeano: “¿La historia se repite? ¿O se repite sólo como penitencia de quienes son incapaces de...

  •  

    Simplemente Joaquín

    · Víctor Fernández

    Seamos sinceros, a ninguno de los que apreciamos a Joaquín con la misma intensidad con la que admiramos a Rafael...

  •  

    Qué pesadilla

    · Víctor Fernández

    Los dos esperpentos firmados por España han servido, bendito sea Dios, para librarnos de la Selección y la romería que arrastra hasta el...