Una devoción made in Sevilla
María José Caldero 05/12/2022 |
"Las Hermandades de Gloria son un tesoro patrimonial". Así se manifestaba Mario Daza en ‘El Cabildo’ de la semana pasada y no le falta razón al recientemente nombrado pregonero de las Glorias del próximo año.
Son corporaciones con una marcada personalidad, cuya riqueza patrimonial y devocional pasa desapercibida para el público cofrade que no ve más allá de lo que ocurre de Domingo de Ramos a Domingo de Resurrección.
El 8 de diciembre recibirá el pregonero de las Glorias las pastas del pregón delante de la Divina Pastora de Santa Marina, la primera pastora del mundo, advocación netamente sevillana que mutó en devoción universal.
Una visión de fray Isidoro de Sevilla en el Convento capuchino de las Santas Justa y Rufina. Era junio de 1703. A fray Isidoro no le creyeron cuando explicó que había visto a la Virgen vestida de pastora, en el campo, junto a un rebaño de ovejas. ¿Cómo podía aparecerse la Madre de Dios como una simple pastora?
Convencido de su visión, el fraile encargó al pintor Alonso Miguel de Tovar, discípulo de Murillo, un lienzo que representara la imagen que él había visto: “bajo la sombra de un árbol…, sedante en una piedra, cubierto el busto hasta las rodillas de blanco pellico ceñido a la cintura, manto azul aterciopelado…, sombrero pastoril…”, “algunas ovejas la rodeaban y todas, en sus boquillas, llevaban rosas, simbólicas del Ave María. En lontananza, una oveja extraviada era perseguida por el lobo, pero pronunciado el Ave María aparecía San Miguel con la flecha que hunde en la testuz del lobo maldito”.
Este lienzo sería la primera representación iconográfica de la Divina Pastora de las Almas. Los frailes capuchinos no andaban por la labor de dar cabida a la nueva iconografía, por lo que será en la iglesia de San Gil donde funde fray Isidoro la primera Hermandad del Rebaño de la Divina Pastora.
El 8 de septiembre del mismo 1703, el lienzo saldría en un estandarte en la procesión del Rosario de la iglesia de San Gil. Dicha pro alcanzó la Alameda de Hércules y allí fray Isidoro llamó a difundir la devoción de la Divina Pastora.
En 1704 se le encarga, presumiblemente, a Francisco Antonio Gijón la primera escultura de la Divina Pastora que será trasladada en 1705 desde la iglesia de San Juan de la Palma a la iglesia de Santa Marina.
A partir de entonces y gracias a la labor continuista de fray Diego de Cádiz, la devoción pastoreña se extendió por todo el orbe católico especialmente por América. Ejemplo de ello es la Divina Pastora de Barquisimeto (Venezuela), primera imagen de la Pastora coronada en el mundo.
Pastora de Santa Marina. Pastora de Sevilla. Pastora del mundo
Origen y Madre. Aquella que en septiembre de 2021 abrió una puerta por la que entró toda la luz secuestrada durante casi dos años.
Con Ella volvimos a mirar horarios, a la bulla, a ponernos de puntillas, a afinar el oído adivinando cercanías, en definitiva, volvimos a ser y a estar en las calles.
Las Glorias son mucho, son más, son la parte y son el todo.
Gloria a quien gloria nos trae.
Gloria a las Glorias de Sevilla.