El broche perfecto para una nueva edición de la Education Football League

José Antonio Jiménez 28/05/2022

Este fin de semana, en sus diferentes sedes, se ha puesto punto final a la Novena Edición de la Education Football League. Una despedida en la que se han dado cita todos los equipos participantes: Bormujos (Mini y Prebenjamín), Santiponce (Infantil F7, Infantil F11 y Alevín/Infantil Femenino), Pilas (Alevín), Villanueva (Benjamín) y San Roque (Prebenjamín 2 y Cadete 11). En total, 175 equipos que han disfrutado en los últimos meses de su deporte favorito y que se han empapado de un valor tan relevante para dicha Liga: La Educación.

"Ha sido una temporada especialmente complicada, el COVID también afecta a este ámbito. Pero fue una decisión importante tirar hacia adelante a principio de temporada porque veíamos que los niños disfrutaban en el campo. Al final, la temporada ha sido todo un éxito. Es necesario que los niños jueguen, algo que nos permite esta Liga en estas edades”, comentaba durante el evento final de la sede de Bormujos uno de sus responsables, Miguel Ángel Ramírez.

"Los niños quieren ganar, continúa Ramírez, quieren competir. Les viene de serie. Pero intentamos que estemos en un contexto más controlado, dejando al margen situaciones que no se ven en otros deportes y que tratamos de erradicar. El fútbol formativo no debe centrarse en el desarrollo de unas capacidades en una edad concreta. El fútbol es una herramienta educativa muy potente. La Education Football League es una Liga distinta. El foco lo ponemos también en la educación en valores, en el compañerismo… Todo esto lo puede encontrar en un deporte tan rico como el fútbol”, recalca para echar la vista atrás y acordarse de los 50 equipos que participaron en la primera edición (en 2013, cuando algunas escuelas se concienciaron de que había que entender el fútbol base de otra manera) y de la necesidad de contar con un mayor apoyo público y privado para una Education Football League que ya piensa en su décima edición.

Otra de sus cabezas visibles, Javier Téllez, aprovechaba la ocasión para asegurar "nacimos hace nueve años con una filosofía muy clara: Que en todos los campos donde se disputase fútbol se viviera un ambiente de diversión, de valores, de compañerismo y que lo competitivo pasara a un segundo plano. El fútbol lo tiene todo para educar en la vida. Al final, el fútbol te da valores que luego te ayudan para la vida. Queremos escuela, equipo. Calidad más que cantidad. Valoramos el fútbol en su totalidad. Todos quieren ganar, pero también hacer amigos”. El exfutbolista del Cerro también comentaba que “cada vez pasan más niños por esta Liga, cada vez cala más. Ha sido todo muy fructífero. Ha merecido la pena y merece la pena. Ahora toca seguir reforzando el fútbol femenino y la calidad antes que la cantidad. Queremos mantener ese perfil de escuela. Con esa filosofía, tienen abiertas las puertas todas las escuelas que lo deseen.

En una Liga distinta, necesaria, también tienen su particular peso específico las personas que imparten justicia durante sus partidos. Una de ellas José Manuel Pineda, árbitro educador que ya acumula a sus espaldas cuatro ediciones de la Education Football League. “Mi labor va más allá de pitar. Interactuamos con los chiquillos. No pitamos una falta y damos la espalda. Damos una explicación para que se sientan cómodos dentro del campo, somos un monitor más. Hablo con ellos antes del inicio de los partidos, les hablo de la Liga que jugamos y de los valores que debe haber dentro del terreno de juego. les recuerdo que las reglas hablan de adversarios y no de enemigos”, recalca uno de los eslabones de una cadena en la que no faltan los distintos entrenadores-educadores de los distintos equipos de la Education Football League.  

Formación, buen ambiente y diversión, los tres pilares fundamentales de una Education Football League que no ha podido tener estos días un mejor broche para ponerle el punto final a su novena edición. Una Liga diferente que crece curso a curso.