Un único discípulo por el camino

Bernardo Ruiz 20/11/2023

Cuando noviembre camina sin remisión hacia la evaluación previa de diciembre, las estadísticas adquieren una dimensión sobresaliente. Los sub 23 cuantifican en minutos su participación en la jungla de la Tercera Federación, una categoría en la que tratan de explotar sus virtudes con el fin de asaltar el semiprofesionalismo antes de que los rigores de la etapa madura de sus carreras asuman el máximo protagonismo.

Uno de los conjuntos del pelotón de embajadores de la vieja Híspalis que funciona hasta la fecha a pleno rendimiento es el Utrera de Miguel Ángel Montoya, que en Conil propició el estreno de un nuevo componente de la formación de Consolación. El polivalente mediocentro sub 23 Manu Picón, que se había ausentado de la dinámica colectiva a causa de unas molestias musculares, acumuló sus primeros minutos ante el combinado costero.

El otrora canterano del RC Recreativo de Huelva, de 20 años y que aterrizó en el San Juan Bosco en verano procedente del Ayamonte, sumó 12 minutos en su cuentakilómetros después de relevar al talentoso Vicente. Picón, que en su singladura en el San Roque de Lepe participó en la Copa del Rey ante el Getafe, ya fue citado en el último encuentro en Consolación ante la AD Cartaya, aunque no logró debutar.

Con el bautizo del ex del Decano han sido ya 21 los pupilos de Montoya que han concursado en la Liga. Sólo el eléctrico extremo David Segura, uno de los jugadores más determinantes de la propia competición, aún no ha intervenido en el caprichoso certamen de la regularidad. El de Los Palacios fue intervenido quirúrgicamente la anterior temporada de una rotura completa del ligamento cruzado de su rodilla y aún no se ha calzado las botas en un partido oficial.

El otrora atacante de UD Salamanca CF UDS, Real Murcia o Recreativo de Huelva, que afronta la fase final de su recuperación y ya se ejercita con el grupo, fue operado el pasado 14 de marzo en la Clínica Quirón Salud de Sevilla.