Joaquín y Jesús Navas, como Abdul-Jabbar en 1988

J.A.J. 12/01/2021

Se habla esto días de la vuelta de Seattle a la NBA. Una ciudad que se quedó sin franquicia hace unos años por razones no demasiado contundente. Y si vuelve, sin la necesidad de hacerse con los servicios de otra franquicia, tendrá que confeccionar una plantilla de la nada. Usando el mismo artilugio usado por Miami Heat o Charlotte Hornets para estrenarse en 1988 de la mejor manera posible. Para eso, la NBA les dio la opción de elegir a los jugadores que el resto de equipos no había protegido (siete por plantel) en el famoso Draft de Expansión de 1988 (toca recordar que una de las apuestas de Miami fue el excajista John Stroeder)

Curiosamente, los Lakers dejaron fuera de esa lista de intocables a uno de los mejores jugadores de su historia (Kareem Abdul-Jabbar). Una leyenda ya en el crepúsculo de su dilatada y exitosa carrera (colgó las botas en 1989) que no fue seleccionada ni por Miami ni por Charlotte. Eso sí, la franquicia del estado de Florida logró a cambio una pequeña recompensa por el detalle (los californianos cedieron los derechos de una segunda ronda del Draft de 1992). 

Al igual que sucedió con el otrora Lew Alcindor, pasa estas semanas con Joaquín Sánchez y Jesús Navas. Dos futbolistas que acaban contrato respectivamente con el Real Betis y el Sevilla FC, que no son objeto de deseo de ningún otro conjunto. Y es que, igual que ocurriera hace más de tres décadas con uno de los mejores pivots de todos los tiempos, es evidente que el portuense y el palaciego seguirán en activo hasta que sus respectivos cuerpos digan basta defendiendo las camisetas de sus actuales clubs (más cerca parece el adiós del primero que del segundo). No de otros a los que no se les escapa que los futbolistas emblemáticos de un club tienen que retirarse en el lugar que se merecen. En esta ocasión, en Heliópolis y Nervión. Como Abdul-Jabbar en Los Ángeles Lakers a la conclusión de la campaña 1988/89.

Por cierto, todos los equipos rindieron pleitesía al '33' en las vísperas de sus duelos caseros ante los angelinos. Hasta los Celtics se volcaron con su eterno rival en el mítico Boston Garden. ¿Se imaginan algo igual en nuestra Liga...?