Guido, una renovación pendiente de alto valor deportivo pero no tanto en lo económico

Paco Cepeda 05/12/2022

El Real Betis vuelve a tener por delante la tesitura de abordar una renovación que en lo deportivo no tiene la más mínimo duda, pero que no ayudará a la reconstrucción del equipo en una cuestión principal: la revalorización de los efectivos. Nos referimos el caso de Guido Rodríguez, mundialista con Argentina, que está en el momento más alto de su carrera, fundamental para Pellegrini, que por tanto querrá ponerse a un nivel elevado en la escala de los salarios del plantel. Pero Guido cumplirá antes de acabar la temporada 29 años, y por tanto su posible venta se dificultaría. Y si el Betis necesita rendimiento deportivo, por supuesto, también está obligado a vender a alguno de sus mejores jugadores siempre que merezca la pena.

Guido termina contrato con el Betis en 2024, y siempre es mejor atarlo que dejar que su contrato llegue a su fin, porque libre, sin tener que pagar traspaso por él, si se convierte en un jugador de mercado, otra cosa es que a su edad se tuviera que hacer un fuerte desembolso, como necesitaría el Betis. Además, el club de origen del argentino, el América, se reservó un importante porcentaje de sus derechos económicos.

Los agentes de Guido han quedado con el Betis para después del Mundial. El centrocampista, al menos hasta este momento, sólo ha jugado un rato, y no muy bien, por lo que Scaloni lo tiene en el banquillo de forma permamente, así que ese factor de revalorización en el escaparate del Mundial no podrá ser argumentado por sus representantes para elevar el precio de la posible renovación. Pero es seguro que Guido pasará a ser uno de los mejores pagados. La tabla del límite salarial también tendrá que ser comtemplada, porque el Betis está al límite.

A corto plazo, el Betis sin duda, tiene asegurado un equipo muy hecho, con una columna vertebral formada por Canales, Fekir, William Carvalho, Guido y Borja Iglesias, pero sin posibilidad de generar importantes plusvalías, que en los tiempos que corren tiene mucha importancia, sobre todo cuando los números empiezan a ser muy precocupantes.