La importancia de creer: ahora los minutos finales son oro puro

El Real Betis ha adquirido una virtud que diferencia a los equipos competitivos de los que no lo son: la capacidad para decidir los partidos a su favor en sus últimos minutos. Lo sucedido ante el Getafe es un buen ejemplo. La secuencia comenzaba ante Osasuna en tierras navarras tras los tantos de Borja iglesias y Miranda entre el minuto 75 y el 91'. Luego vino el gol de Guido Rodríguez ante el Cádiz en el minuto 71, los de Mandi y Sanabria ante el Huesca en el 77' y el 90' en tierras aragonesas, los de Canales y Joaquín en el 85' y el 92' ante la Real Sociedad con 2-0 en el marcador para los de Imanol... El de Borja Iglesias de nuevo ante Osasuna en el 79'... Finales que han reportado nada menos que 16 puntos. Casi nada. Hubo otros tantos que cayeron en saco roto por muy poco, como los de Canales en la noche de su reaparición ante el Levante, que casi le dan un punto a los de Pellegrini, o el de Víctor Ruíz frente al Barcelona en el minuto 75, un gol que sabía a empate ante los de Koeman.

En la Copa, sin olvidar lo sucedido ante el Athletic de Bilbao, el Betis fue capaz de dejar en la cuneta a la Real Sociedad en una eliminatoria que tenía perdida en el tramo final gracias al doblete de Borja Iglesias en la prórroga, posterior al gol de Canales en el 77' que le daba a su equipo la opción de seguir con vida en los octavos de final. Sexto en la tabla, el Betis ya no tira la toalla. Saca adelante sus compromisos en los finales de partido gracias a la fe. Manuel Pellegrini ha obrado tan trascendental cambio.

Imagen: medios oficiales RBB

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