Dilema Iheanacho: no debe jugar, pero si no juega...

Miguel Ángel Chazarri 01/10/2024

¿Qué le pasa a Iheanacho? ¿Aparte de sus remates hacia atrás, que no es poco, por qué pasa por los partidos ausente? Es la gran pregunta que rápidamente conduce a su estado físico, en modo alguno el aconsejable. Desde el club aducen que no haber hecho pretemporada lo ha 'matado'. Pero, claro, ya lleva aquí dos meses. Aterrizó en San Pablo a finales de julio como el quinto refuerzo en la planificación de Orta. Ha pasado tiempo suficiente para que se vea a otro Iheanacho, que nunca destacó por su capacidad de trabajo y sí por su calidad y talento para los controles y remates.

García Pimienta ve lo que todo el mundo. El entrenador no está ajeno al problema. Pero sabe que o lo pone o lo pierde. Cuando juega Iheanacho, es la nada. Sus pases son pocos y fáciles. Y cuando se pone de gol, remate de cabeza para atrás ante el Valladolid y una posición en fuera de juego, con toque también hacia atrás, en San Mamés. Detalles de estar fuera de órbita. Los entrenamientos son la base para jugar. Afinan los partidos, siempre y cuando se muestre un nivel mínimo y sobre todo una progresión.

Mateo Mejía, más en diez minutos

El derbi, en principio, será para Isaac Romero, aunque no se encuentra a tope y a lo largo de la semana se irá probando. Mateo Mejía (21 años) ha necesitado algo más de diez minutos para dejar en evidencia al nigeriano. Simplemente, Mejía está en forma y presionó a Agirrezabala como un jugador en forma. Fuerte, con chispa, llegando... Aunque los debates conviene moderarlos, ya surgen voces que piden a Mejía por Iheanacho si el lebrijano no se recupera para el domingo. Mateo Mejía ha marcado esta temporada 3 goles en Primera RFEF en cinco partidos.

El Sevilla se encuentra con un grave problema de gol de sus delanteros. Aún no han marcado y ya se lleva un buen número de partidos. Isaac Romero sí aporta, pero delante del portero ha fallado. Iheanacho, lo dicho. Peque no termina de romper el cascarón. Ofensivamente, el equipo vive de sus bandas (Lukebakio y Ejuke). Hasta Navas tuvo que marcar ante el Getafe... García Pimienta ve mal a Iheanacho, pero su caso es el de la pescadilla que se muerde la cola: no debe jugar, pero necesita jugar. Su aparición más llamativa fue en un remate ante el Villarreal que detuvo Diego Conde. Desde entonces, desconectado. El nigeriano vino para sustituir a En-Nesyri y de momento las comparaciones son odiosas.