Sevilla FC
4-2: Primero un Messi y luego el otro (Ter Stegen)
 Paco Cepeda 20/10/2018 |
El Sevilla FC se dejó su liderato en el Camp Nou. No es algo que no se pueda dar nueve de diez veces, pero en esta ocasión da un coraje especial porque muchas cosas rodearon a este encuentro para que el maleficio sevillista ante el Barcelona tuviera un sonado final. El resultado desde luego es mucho más duro que este primer párrafo de la crónica, pero es que el Sevilla, frágil atrás, acordabado ante Messi cuando el mejor entre los mejores estuvo en el campo, dispuso de muchas, pero muchas ocasiones de gol, pero en esta ocasión no hubo puntería, y sin efectividad, en un campo de albero de Tercera, caes, así que en uno de los templos del fútbol mundial, pues más. Al Sevilla también le faltó más claridad en las posiciones vitales de Banega y Mudo, más en el caso del primero que del segundo. Sus pases filtrados se echaron de menos. Sus pérdidas fueron letales.
En realidad hubo dos partidos, uno que apuntaba a tragedia sevillista con Messi leyendo mejor que nadie las debilidades de un Sevilla al que se le veía estirado, con presencia arriba, pero sin dar el golpe que necesitaba. Coutinho la puso en la escuadra y Arana la mandó la palo. Primera explicación. Messi hizo el segundo en un abrir y cerrar de ojos. Los aficionados sevillistas seguro que cerraron los ojos. Pero todo cambió, pese a que al final nada lo hizo.
Y es que tras la lesión de Messi, antes del minuto 20, el Sevilla se multiplicó en ataque. Se apoyó en Navas para percutir una barbaridad, pero se quedaron en llegadas buenas aunque sin pólvora. Gran partido en defensa del Barcelona (especialmente Piqué y Jordi Alba), que también le quitó punch final a un Sevilla muy desplegado en ataque. Daba la impresión de que el Sevilla, si hacía un 2-1 para alimentar su fe, podía dar un golpetazo en el campo en el que se jugaba el liderato. Pero no llegó, y eso que hubo múltiples ocasiones, y a la contra, Luis Suárez sí que la hizo. El Barcelona también tuvo y muchas opciones de gol, no fue una casualidad ni un exceso de puntería que hiciera cuatro, pero el Sevilla se encontraba una y otra vez con Ter Stegen, inmenso, el mejor de todos los jugadores del encuentro. El gol de Sarabia, con un rebote sobre Lenglet, de otro modo era imposible, llegó muy tarde, o no tanto, porque hubo más oportunidades clarísimas, pero es que el meta del Barcelona es una especie de Messi de las porterías. Muriel fue el único que se lo puso imposible e hizo el gol que mereció el Sevilla mucho antes, cuando Rakitic ya había sentenciado de nuevo.
Le faltó agresividad y convicción al Sevilla, es cierto, pero sobre todo faltó puntería. No puede ser bueno perder en ningún caso, de hecho siempre es ruina, pero pese a todos los defectos, el Sevilla dejó impronta de que lo mismo este año queda muy arriba. Sobre todo si Caparrós acierta en enero con dos fichajes de nivel en puestos clave.
FICHA TÉCNICA:
FC Barcelona (4): Ter Stegen, Semedo, Piqué, Lenglet, Jordi Alba, Busquets, Rakitic, Arthur (Sergi Roberto, minuto 66), Leo Messi (Dembelé, minuto 26), Luis Suárez (Munir, minuto 81) y Coutinho
Sevilla FC (2): Vaclík, Jesús Navas, Dani Carriço, Kjaer (Mercado, minuto 54), Sergi Gómez, Arana, Banega, ‘Mudo’ Vázquez (Roque Mesa, minuto 69), Sarabia, André Silva (Luis Muriel, minuto 78) y Ben Yedder.
Goles: 1-0, minuto 2: Coutinho. 2-0, minuto 12: Leo Messi. 3-0, minuto 62: Luis Suárez, de penalti. 3-1, minuto 79: Sarabia. 4-1, minuto 87: Rakitic. 4-2, minuto 90: Luis Muriel.
Árbitro: Martínez Munuera, valenciano. Amarilla para Vaclík.