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Histórico pacto de los grandes capitales del Sevilla que aleja el momento de la venta

Paco Cepeda
Paco Cepeda
29/11/2019

La Junta General de Accionistas del Sevilla FC, retrasada hasta el 30 de diciembre, como se adelantó en este portal y en El Pelotazo de Canal Sur Radio, va a ser histórica. Va a incluir un gran pacto para la estabilidad real de todos los grandes accionistas de la entidad (esperan la adhesión de los no tan grandes y de los pequeños), que aleja al menos de momento el temor de algunos por la venta del club a un capital extranjero, y que tiene un plan estratégico de actuación destinado a un crecimiento económico y una internacionalización de la marca que traiga el dinero suficiente para dar una vuelta de tuerca en lo relevante, en lo deportivo. A los actuales administradores, las familias Castro-Guijarro, Carrión y Alés, se suma la Del Nido, y juntan una mayoría rondando el 75% de la entidad. 

Hay temas conflictivos, pero explicados por el presidente José Castro en una carta abierta al sevillismo en la que adelanta que los administradores van a cobrar, como hasta ahora, pero un fijo, no en función del beneficio. Son gente dedicada a esto y quieren plena dedicación remunerada para dar ese paso. El mal pensando siempre podría decir que venden a un jugador o a otro en función de dar o no beneficios, así que han decidido poner un fijo, no un variable.

Y no se blinda exactamente el Sánchez-Pizjuán y la Ciudad Deportiva, porque además es algo inútil teniendo en cuenta que un propietario que comprase las acciones que sustentan esta mayoría podría hacer lo que quisiera en una nueva Junta, pero sí avisan de que se seguirán haciendo inversiones en ambos inmuebles para abundar en ese crecimiento. Sería absurdo seguir echando dinero en unas instalaciones para luego tratar de hacer pisos. No van por ahí los tiros. De hecho, no se blindan estas infraestructuras por su esterilidad de cara a una posible venta a terceros pero sobre todo porque el propio Sevilla no quiere bajar el valor de un inmovilizado que lo mismo tendría que ser hipotecado parcialmente si se quieren acometer obras de mayor calado, para pedir el préstamo necesario. Sí parece que van a reforzar (aunque sirve de poco) el capital necesario para enajenar algún inmueble.

Seguramente el acuerdo no deje satisfechos a los minoritarios, pero es intención de la gente que administra el Sevilla la de ir sumando voluntades. Y lo que parece evidente es que el momento de la venta del club como mínimo se retrasa, porque este nuevo pacto entre todos se produce para seguir juntos "con ADN sevillista".