muchodeporte.com Sevilla FC

Monchi y el Big-Data: la habilidad de saber elegir "entre 8 millones de datos por partido"

Miguel Ángel Chazarri
Miguel Ángel Chazarri
26/05/2020

Monchi dedicó su masterclass al célebre Big Data, del que tanto se viene hablando en Sevilla en los últimos tiempos. El de San Fernando se mostró absolutamente partidario de controlar, analizar e interpretar el dato, hasta el punto de que considera que quien no se monte en dicho tren no alcanzará el éxito. Aunque como suele pasar, todo es relativo, ya que no se trata de tener el dato, algo al alcance de cualquiera hoy día, sino de "saber quedarse" con el dato correcto.

"Un partido genera 8 millones de datos", expuso Monchi, que enseñó algunas fichas de seguimiento que el Sevilla ha realizado a algún jugador, como por ejemplo al belga del Anderlecht Yari Verschaeren. Es de suponer que precisamente por enseñarlo de esa forma tan abierta, no vendrá. Verschaeren es un mediocentro ofensivo de 18 años que esta temporada ha jugado 22 partidos (2 goles, 1 pase de gol).

La filosofía de Monchi es aplicar el dato sobre tres áreas: la de scouting, la prevención de lesiones y la realidad del mercado. En cuanto a lo primero, el hecho de contar con un buen departamento de I+D ahorra tiempo y reduce el riesgo. En cuanto a la prevención de lesiones, se trata de controlar todas las variables del jugador (carga de entrenamientos, minutos jugados, horas de sueño...) para que la "luz naranja" salte y dé información para atajar un posible problema.

En cuanto al mercado, Monchi explicó que no hace mucho a los futbolistas se les ponía un precio por mera intuición. Ahora entran en juego variables que hay que saber interpretar para, por ejemplo, vender al jugador en su pico más alto de rendimiento, una de las razones del éxito del Sevilla. Para el director general deportivo, cada vez son más necesarios en los clubes perfiles hasta ahora nunca contratados, como el de ingenieros o matemáticos especialistas en el extensísimo mundo del Big Data, que de amplio que es puede confundir si falta sapiencia.