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0-1: Grande contra el grande y enano contra el pequeño

Lucas Haurie
Lucas Haurie
24/10/2020

Dos victorias en siete partidos oficiales, cero de seis en Liga en cuanto los esfuerzos se han empezado a multiplicar y casi cuatro partidos sin marcar, desde que De Jong batió a Neto en el Camp Nou. El Sevilla no tiene ningún motivo para el optimismo, tan cambiante que es este negocio, porque las malas noticias se acumulan no sólo en el aspecto contable, que también, sino porque el equipo no juega un pimiento. Compite frente a los grandes, ayuno de responsabilidades creativas, y compite igual frente a los pequeños, sin mostrarse un gramo de la superioridad que se le supone. Julen Lopetegui debe darle una vueltecita al asunto a la voz de ya.

Koundé y Fernando. Dos de los futbolistas fundamentales del Sevilla se ausentaron de la alineación frente al Eibar, el uno por coronavirus y el otro por descanso preceptivo, y el equipo lo pagó con una puesta en escena horrible, un festival de espesura coronado, al filo del descanso, con el gol de Kike García que retrató a los dos reservistas: Gudelj contempló sin ademán siquiera de tapar el pase de Diop y Sergi Gómez se paró mientras el delantero  se desmarcaba y le ganaba la posición para fusilar a Vaclik, otra de las sorpresas en el once de Lopetegui. Añorarán algún comentario de los primeros 45 minutos, quizás, pero es que fueron una pura siesta.

Del equipazo que se plantó con todo el desparpajo del mundo en Stamford Bridge, ni la sombra. El portero encajó en el único disparo, los centrales eran de cartón, el mediocentro suplente desmerece con mucho al titular, el ‘10’ de este año es una broma comparada con el del pasado, el delantero parece una broma pesada y el fichaje de muchos millones, recientemente internacional, se entregó al desvergonzado narcisismo de intentar meter dos faltas que murieron a un kilómetro de la portería. Al reanudarse el juego, Ocampos saltaba al césped por Sergi Gómez, que quedaba definitivamente señalado con un cambio tan sumario como justo.

La reanudación llevó algo de esperanza al campo local, ya que se sucedieron las llegadas, si bien sólo una realmente peligrosa, una bonita combinación entre Navas y Munir que dilapidó lastimosamente En-Nesyri. Al marroquí apenas le quedan balas por disparar, pues casi todas las que ha tirado son de fogueo y todo tiene un límite, también la paciencia de quienes lo han fichado e incluso la provincia de Badajoz. No le gustaba a Mendilibar lo que veía, a su equipo acochinado en tablas, así que tuvo la luminosa idea de sacar a un segundo delantero, Sergi Enrich, para molestar la salida del balón de Rakitic, que sin nadie que le presionase estaba dando unos minutitos la mar de decentes.

El movimiento del técnico visitante desactivó al Sevilla, que ya encomendó a la heroica para el arreón final, con Carlos Fernández y Suso a la yerba para construir un ataque por acumulación. Se trataba de cazar una, deseablemente dos. El gaditano, Rakitic y Mudo Vázquez, que salió en los minutos finales por el croata, conformaron un terceto de anonadante ausencia de ritmo: diríase que geriátrico o, como poco, impropio de un equipo que blasona grandes ambiciones. Munir, justo antes de irse al banquillo asfixiado (¿por qué este chico jamás aguanta noventa minutos?) ensayó una media tijera que pasó cerca de la cruceta de Dmitrovic, que apenas si se mancó las calzonas en una tarde plácida, como de paseo en familia por el parque, excepto por el balón que Ocampos sacó de la raya en el último suspiro. Y así se vino la crisis, queridos amigos.

Ficha técnica:

Sevilla FC (0): Vaclík, Jesús Navas, Sergi Gómez (Ocampos, minuto 46), Diego Carlos, Acuña, Gudelj, Rakitic (‘Mudo’ Vázquez, minuto 79), Óliver Torres, Munir (De Jong, minuto 79), Óscar (Suso, minuto 69) y En-Nesyri (Carlos Fernández, minuto 69).

SD Eibar (1): Dmitrovic, Álex Pozo, Burgos, Oliveira, Kevin (Enrich, minuto 61), Diop, Sergio Álvarez, Inui, Bryan Gil (Pedro León, minuto 85), Inui y Kike García (Expósito, minuto 73).

Goles: 0-1, minuto 41: Kike García.

Árbitro: Hernández Hernández, canario. Amarillas para Kevin Rodrigues, José Luis Mendílibar y Expósito.