Parte de goles, lesiones y sinsabores a la madrileña

Javier González-Cotta 27/11/2021

Parte de goles. Al SFC le esperará en Salzburgo un partido crucial para su pervivencia en la Champions. La alta Austria lo recibirá bajo un silencio cementerial. No habrá público en los graderíos del estadio. Los contagios por coronavirus en un país infravacunado obligan al cierre del Red Bull Arena. El equipo entrenado por el insolente treintañero Matthias Jaille tendrá que aguantarse. Contrasta esta pesada vuelta a los estadios vacíos con los campos a rebosar que hemos visto en la última jornada de la Europa League. Confesamos que este segundo torneo nos encandila por varios aspectos que hacen que el fútbol nos guste por encima del amaneramiento al que lo están conduciendo unos y otros. Ponemos el multifútbol en pantalla y asistimos a un corifeo de goles continuos. Pero, sobre todo, nos distraen los graderíos casi siempre a rebosar. Si no es el férvido ambiente de los hinchas del Glasgow Rangers en el Ibrox Stadium, el multicanal de pago, esa joya que aún podemos permitirnos, salta a la bullente olla del Georgios Karaiskakis de Atenas, que enfebrece cuando marca Olympiacos al Fenerbahçe turco en la última lágrima del partido. La Champions es la élite y a veces nos lleva peregrinamente por tierras de Transnistria o Azerbaiyán. Cierto es, pero son excepciones. La Europa League nos da muchas más lecciones de geografía variada, con equipos de nombres en ocasiones impronunciables, que juegan en ciudades a veces aledañas al círculo polar ártico o situadas sobre más y más confines euroasiáticos. Estamos a nada de engancharnos al carrusel de goles y gentilicios de la Conference League.

Parte de bajas. Es cierto que los partes médicos del SFC tienden al oscurantismo y nos ponen nerviosos más de lo necesario. La pasada temporada discurrió ayuna de lesiones graves o molestas en cuanto a duración. Estábamos mal acostumbrados. Ahora lo sabemos. Navas y En-Nesyri forman ya parte del glosario de bajas clásicas. Suso reincide y ahora es Lamela quien nos preocupa severamente. Mientras escribimos la presente nota sabemos que peligra la titularidad de Koundé, Diego Carlos y Ocampos. Nada ayuda saber que el canterano José Ángel, aunque inédito, se operará de pubis y no podrá estar disponible en ninguna alineación de urgencia que hubiera podido haberse deparado justo ahora, cuando se entra en el segundo tercio de la temporada y el margen de error será menor e irá poniendo a cada cual en su sitio. No estábamos acostumbrados, lo dicho. Pero den luz al menos a esos partes oscuros y oscurantistas.

Parte de sinsabores. El partido contra el Real de Madrid viene precedido del clásico parte de sinsabores estadísticos. Un año que pasa y otro resultado adverso cosechado en casa del gran amigo y anfitrión Florentino y Pérez. Leemos lo que informan los compañeros de redacción de esta casa. Trece años han pasado y trece derrotas y un solo empate, conseguido el pasado año en el retiro forzado de Valdebebas, nos han acompañado. Lo peor del próximo partido contra el Real de Madrid no es la derrota casi asegurada con todos los deshonores. Es, sobre todo, la hora tardía, a eso de las 21 horas de un domingo ya moribundo.