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Derbi, derbi, derbi (o el mantra coñazo)

Javier González-Cotta
Javier González-Cotta
14/01/2022

Derbi 1. Dice Antonio Muñoz, el nuevo corregidor de Sevilla, que está encantado con que su nueva era como ángel custodio de la ciudad se estrene con "un derbi en la cumbre". Esto es, el SFC (segundo) y el Betis (tercero). En plan pejiguera, le diremos al alcalde que no se trata de ningún "derbi en la cumbre". ¿Qué cumbre? Una cosa es la escalada en la Liga, con un equipo segundo y el otro tercero, y otra cosa bien distinta es este duelo a pistola en la Copa, que llega a destiempo, en los aún fríos octavos y, para colmo, a un solo partido en Casa Benito. Nos habría gustado que "el derbi en la cumbre" se hubiese disputado donde corresponde, como partido de Liga y no de Copa. Sevillista confeso (loado sea el Señor), añade el nuevo alcalde que hay que agradecer la envidiable situación por la que atraviesan los dos clubes de la ciudad. Todo ello influye –afirma– en el buen ánimo de los sevillanos. Convertido ya Juan Espadas (bético confeso) en retrato para el recuerdo del Salón Colón, es normal que Muñoz apele a los buenos sentimientos mutuos. Pero en esta ciudad demediada es bien sabido aquello de que tu felicidad es mi vinagre y tu frustración mi salmo y mi contento. Esto ha sido así siempre, desde la noche de los tiempos, de cuando Biri Biri, aun siendo negro de Gambia, alumbró nuestro destino por la senda de Nervión. Los de la otra acera, visto todo desde su perspectiva opuesta, estarán cordialmente de acuerdo conmigo.

Derbi 2. En esta molesta semana de derbi acaba de aterrizar el 'Tecatito' Corona. Lo hace como fichaje para el SFC hasta que quien esto escribe frise ya los 55 años. O sea, que hasta 2025 ha firmado el jugador por el que tanto clamaba Lopetegui. Pese haberlo hecho al abrigo de su familia y en lujoso jet privado, el 'Tecatito' no ha aterrizado del todo bien. Nos recuerda la edad que tendremos cuando expire su contrato. De nuevo el airecillo fúnebre de Virgilio ('Tempus Fugit'). Tampoco nos gusta este gusto tan mexicano por los motes, sobre todo los que remiten a cutres diminutivos ('Chicharito', 'Tecatito'). En teoría se antojan cariñosos, pero a uno le irrita este gusto tan azteca por el mote, como este de 'Tecatito' que parece remitir más al de un boxeador de peso pluma nacido en Chihuahua. Todo prejuicio se diluirá en caso de que el 'Tecatito' haga bueno aquello que dijo Lopetegui dos años atrás: "Lo ficharía con los ojos cerrados". Imaginemos pues, con los ojos cerrados, que el 'Tecatito' juega el derbi y que marca otro histórico gol en Casa Benito. Sería como para hacer las paces, como emisarios de Hernán Cortés, con el muy cainita Andrés Manuel López Obrador.

Derbi 3. Hay que estar atentos a la enfermería en los partes de vísperas del derbi. Como ya hemos dicho otras veces, nos ha entrado últimamente un aliciente de lo más pernicioso por ver qué nuevo jugador se lesiona o da positivo por covid. Ahora, además, hay que mirar al peligro venido de fuera. El Newcastle, el equipo de las urracas adquirido por el petróleo saudí, quiere fichar ahora a Diego Carlos a tocateja, pagando su potosí bañado en el clásico oro negro. Pobre Julen. Su contento dura lo que un pestañeo. Le traen por fin al 'Tecatito' Corona a la vez que le entra una alarmante vía de agua en la defensa. Veremos en qué queda todo en la cuenta atrás del sábado en Casa Benito. Sí, derbi, derbi y derbi. El de la falsa cumbre (derbi 1). El más molesto de los últimos años (derbi 2). El que aparta la Liga por un simple empujón en octavos de Copa (derbi 3). Derbi, derbi y derbi. No hay mantra de enero más pesado.