Sevilla FC	vs	PSV
3		0

Ficha técnica · El Mejor

Liga Europa (2022/2023) > 1/16 de final

Autoestima e ilusión

El rey de la Liga Europa no abdica ni en su peor hora. El Sevilla, que en la Liga pugna por no descender, se regaló un festín a costa del PSV Eindhoven y ya se ve en los octavos de su competición favorita. Tres golazos, todos de diversa factura, acumulados en ocho minutos con un descanso por medio deben convertir en un trámite la visita a Países Bajos de dentro de seis días. La quinta victoria consecutiva en casa del equipo de Sampaoli tiene mucho más fuste que las anteriores. En una jornada continental en la que todos los marcadores fueron apretados, el hexacampeón del torneo dijo aquí estoy yo y se chutó una tonelada de autoestima y le regaló a su sufrida parroquia. Este equipo no está para ganar nada, vale, pero puede deparar unos cuantos jueves emocionantes.

El fantasma del Sevilla premundialista, perro flaquísimo infestado de pulgas, sobrevoló Nervión en la primera media hora. Badé, cuya incorporación había traído las primeras esperanzas, se lesionó y su cambio por Fernando propició un rato de despiste generalizado, un jeroglífico táctico que sí descifraba el PSV y no ningún futbolista de blanco. Al son de Xavi Simmons, bailaron un rato lo neerlandeses a sus anfitriones, salvados como casi siempre por Bono, exigido por un tiro cruzado de Saibari, al que había habilitado Luuk de Jong. El exsevillista, como de costumbre, mantenía a su equipo en campo rival gracias a su eficacia en los duelos aéreos.

Rakitic, justamente discutido, lideró junto a Acuña el desperezo del Sevilla. Los dos veteranos volcaron el fútbol hacia la izquierda, por donde alborotaba Bryan Gil. Poco o nada concluía el barbateño, pero su amenaza bastó para que los chicos de Van Nistelrooy se empezaran a preocupar por defender su parcela, aunque sólo un par de amenazas a balón parado alteraron el pulso de Walter Benítez, con un centro frontal que nadie tocó pero pudo colarse y con un remate picado de Nianzou. Al borde del descanso, con el Pizjuán clamando por un penalti por mano, Navas incurrió por su pasillo y metió el mismo centro que lleva casi veinte años metiendo: rasito y al primer palo, donde apareció En-Nesyri para embocar el 1-0.

Ocampos suplió a Bryan en el descanso para coronarse en su primer balón con un control acrobático y un derechazo a la media vuelta que entró tras tocar en los dos postes. ¿Árbitro la hora? Para nada, el purasangre de Quilmes estaba desatado y dejó un taconazo ‘Guti style’ que empotró Gudelj en el techo de la red. El serbio cuenta sus goles, escasos, por obras de arte. Ahora, sí: que se acabe esto. Primero, porque al Sevilla le cuesta terminar los partidos; y segundo, porque el PSV se lanzó a por el gol que lo metiese en la eliminatoria, que estuvo a punto de encontrar con un zapatazo de Vermaan que se estrelló en palo. Escaleras abajo, las caritas del gentío ya no eran la viva imagen de la desesperación. Algo es algo y esto es mucho.

Sevilla FC (3): Bono; Jesús Navas, Nianzou, Badé (Fernando, minuto 16), Gudelj, Acuña (Montiel, minuto 70); Óliver Torres (Lamela, minuto 70), Joan Jordán, Rakitic; Bryan Gil (Ocampos, minuto 46) y En-Nesyri (Suso, minuto 61).

PSV (0): Benítez; Teze, Ramalho (Obispo, minuto 90), Branthwaite, Van Aanholt (Junior, minuto 75); Sangaré, Til (Hazard, minuto 61), Veerman; Simons, Saibari (Mwene, minuto 90) y De Jong (Fabio Silva, minuto 61).

Goles: 1-0, minuto 45+: En-Nesyri. 2-0, minuto 49: Ocampos. 3-0, minuto 55: Gudelj.

Árbitro: Radu Petrescu, rumano. Amarillas para Gudelj y Lamela.

Jesús Navas

Partidazo del eterno capitán. Muy bien Ocampos también cuando salió, Óliver Torres, Fernando, Bono...