0-1: El mejor de la Liga fuera de casa

El Betis tira de la calidad de Joaquín y Rubén Castro y logra con esfuerzo colectivo otro triunfo fuera

Miguel Ángel Chazarri 27/11/2015

El Betis no admite ni una broma fuera. Saca los partidos con esfuerzo, acierto arriba y también limitaciones, especialmente atrás. Pero los saca. Y ya suma 18 puntos, que en pleno mes de noviembre son muchos. Fue un triunfo basado en el esfuerzo colectivo, la base de cualquier éxito. Nadie dimitió en un partido bastante loco, descontrolado y muy auténtico. Las pérdidas de balones se sucedían para diversión del espectador. A la pifia de este jugador, el otro y el de más allá, acudían varios futbolistas atentos a la presión. Y a robar. Y a perderla. Así una y otra vez. Tanto desgobierno termina generando espacios, imprecisiones y ocasiones. Aunque fallar oportunidades, lo que se dice fallar, no lo hicieron demasiado ninguno de los dos equipos. Dieron más sensación de peligro que otra cosa. Eso sí, ni un sólo minuto desapareció la impresión de que podía pasar algo en el partido.

Ese algo clave lo pusieron, nada más empezar el encuentro, Joaquín y Rubén Castro, quiénes si no. Un tuya-mía de dos futbolistas tremendos colocó el primer gol. Dentro del área, Joaquín tiró un quiebro que el defensa se tragó. Vio como medio se incorporaba Rubén Castro. Se la pasó cortita y el delantero se perfiló para colocarla al lateral de la red. Otro golazo clave del hombre clave. Una vez más. Ya tenía el Betis el partido como más le gusta. Preparado para sufrir, correr y encomendarse a su calidad arriba. Cierto es que encontró ayuda de los elementos, que no de la suerte. Porque fallar lo que falló Deyverson (sin portero y en el área chica la tiró al larguero) no es tener suerte. Es que el delantero, simplemente, hizo el ridículo. Tampoco se sabe lo que podría haber pasado si ese balón entra. El fútbol ficción no lleva a ninguna parte.

El otro, el real, lo dominó con apreturas el Betis. Hubiera sido preferible más control de la situación. Para ello es necesario contar con otro tipo de jugadores, especialmente centrocampistas de más poso. No los tiene el Betis como tampoco el Levante. Pero con todo, los del Betis dieron la cara. Todos se agruparon, se ayudaron, corrieron y acudieron allá donde hacía falta una pierna. Gran trabajo de Joaquín dando salida al equipo y tapando las dudas de Piccini. Petros y N'Diaye se fajaron solidarios. De Rubén Castro no queda nada más que decir. Y a los buenos de verdad se va uniendo otro, Dani Ceballos, que cuando deje alguna que otra frivolidad va a marcar diferencias. Se palpa fragilidad en los laterales y siempre se concede un regalo grosero de algún central, sí. Todo ello es materia a corregir, si es que se puede. Por ahora, ese correr sin desmayo hasta que los buenos aparezcan da resultado. La trayectoria fuera de casa ya es seria.

Ficha técnica:

Levante UD (0): Rubén, Toño, David Navarro, Pedro López, Feddal, Simao, Camarasa, Verza (Ghilas, minuto 74), Rubén García (Víctor Casadesus, minuto 59), Morales y Deyverson (Roger, minuto 68).

Real Betis (1): Adán, Piccini, Bruno, Westermann, Varela, Joaquín (Molinero, minuto 91), N'Diaye, Petros, Álvaro Cejudo (Van der Vaart, minuto 75), Dani Ceballos (Jordi Figueras, minuto 82) y Rubén Castro.

Árbitro: Sánchez Martínez, murciano. Expulsó por roja directa a Juanfran y a Westermann por doble amarilla. Amarillas para Deyverson, Álvaro Cejudo, Verza, N`Diaye, Pedro López, Feddal y Adán.

Gol: 0-1, minuto 3: Rubén Castro.