4-0: Decretado el estado de felicidad

El Betis vuelve a firmar un buen partido y golea al Levante con los conceptos de Setién

Miguel Ángel Chazarri 25/09/2017

El Betis de Setién sigue en claro crecimiento. Venía de vencer al Real Madrid, ahí es nada, y se desquitó con facilidad del Levante. Costándole en la primera parte pero tumbándolo nada más salir de los vestuarios en la segunda mitad. En siete minutos subieron dos goles al marcador, motivo por el que el plan de Muñiz dejó de ser plan. Fruto del orden del rival, hubo fases en las que parecía que la noche pintaba dura. Al menos, por lo visto en el primer tiempo, donde se abusó del pase horizontal sin encontrar casi nunca a Guardado, el arquitecto de este convincente Betis. Mucha culpa del atasco la tenía el Levante, que se plantó sin pudor con una defensa de cuatro, una línea de contención de cinco futbolistas y Álex Alegría arriba para bajar lo que le cayera. Y a defender. A jugar en veinte metros. Todo un riesgo. Probablemente, mayor que salir con alguna intención ofensiva, pues un equipo del nivel de los valencianos no puede mantener la perfección defensiva todo el partido fuera de casa. Comprendamos en parte que es normal tan rústico proceder, pues arriba tiene poco o nada.

• Así jugaron los futbolistas del Betis

Hubo un antes y un después del descanso. El Betis salió revitalizado, con otro sentido en sus acciones. Nada más salir, jugada propia del estilo de Setién por la banda derecha. Varios jugadores intervinieron con soltura, pasándose el balón en ventaja hasta ir convirtiendo la jugada en peligro real. El penúltimo toque fue obra de Sergio León, que le mandó un estupendo centro a Sanabria. Saltó el cerrojo. Realmente, ahí acabó el partido. Al Levante se le vino el mundo encima. Sintió que ya no había nada que hacer. Por si le quedaba alguna esperanza, Fabián, creciendo al nivel del grupo, puso el segundo tras una gran cabalgada y un disparo raso.

• El partido en números

El Betis se sentía seguro, suelto, triunfador. Tuvo tiempo hasta de reposar, de dormir la pelota. Como le gusta a Setién. Ya no se puede dudar de que los conceptos del entrenador van entrando por la piel de los jugadores. Con una conexión de la grada como no se recuerda en años, el tercero también fue de manual. Toques precisos hasta que Durmisi enfiló su carril y la puso fuerte, letal para la defensa rival. Ahí estaba Sergio León para empujarla, donde se le reclama. Todos los nubarrones -tampoco demasiado negros, pues el Levante no asustó a Adán ni una sola vez- se fueron a base de buen fútbol. Así, el equipo va en franco crecimiento, toca para desarmar al rival, sin que tampoco se maneje mal en defensa. Los futbolistas se ayudan, no se impacientan, se esfuerzan, hasta el bigoleador Sanabria va camino de enchufarse... El Villamarín hizo la ola y terminó extasiado. Queda decretado el estado de felicidad.

Ficha técnica:

Real Betis: Adán; Barragán (Rafa Navarro, minuto 58), Mandi, Jordi Amat, Durmisi; Javi García, Fabián, Guardado; Joaquín (Tello, minuto 69), Sergio León (Nahuel, minuto 76) y Sanabria.

UD Levante (0): Raúl; Pedro López, Postigo, Chema, Toño; Campaña (Cheick, minuto 67), Rober; Ivi (Samuel, minuto 57), Bardhi (Nano, minuto 57), Morales; Álex Alegría.

Goles: 1-0, minuto 47: Sanabria. 2-0, minuto 54: Fabián. 3-0, minuto 64: Sergio León. 4-0, minuto 92: Sanabria.

Árbitro: González Fuertes, asturiano. Amarilla para Mandi.