"Vini, hermano, yonki y ...."

Vía de Escape

Paco Cepeda 23/05/2023

Tengo por descontado que a partir de ahora pasaré a la prehistoria, a la reprobación pública, mayor si cabe, de mi persona incluso más allá de lo profesional, cuando exprese lo que siento con respecto a lo que podemos denominar 'caso Vinicius'. Mi impresión es que hay varios miles de personas en España que son racistas tal y como debemos entender el término: gente que desprecia a otra persona por su raza. Esa gente es capaz de insultar y hasta agredir porque sí, porque son supremacistas. Menos esos miles, el resto estamos en otro lado. Pero sin embargo los que estamos en esa parte de la normalidad y de la higiene social nos pasamos horas diciendo que entre nosotros los hay que no son los sufientemente claros en ese concepto, que hay mejores y peores ciudadanos que respetamos esas mínimas condiciones de salud social. Hay que decir mil veces que no eres racista, o lo que toque, y si añades un comentario después, estás muerto. Ya no cabe nada más. Así que una vez más: lo de Valencia es intolerable y lo que hubiese decidido la autoridad competente al respecto, incluida la suspensión del partido, pues bien estaría. Lo repito en bucle si desean. A partir de ahora, ya estoy muerto socialmente, por voy a poner unos peros, peros que no significan justificación, pero da igual, cuando hablas más ya es malo. 

Vinicius es igual de negro que otros muchos jugadores negros de la Liga. Es igual de negro que muchos de sus compañeros y rivales cuyo trato es diferente. ¿Deja de ser racismo? No lo sé. Observo y pienso. Me parece muy raro que en el campo del Real Madrid, en el Santiago Bernabeu, al parecer, no haya ningún racista, de esos miles que hay en toda España, allí no hay. Ningún grito de "mono, mono, mono" con ningún otro jugador. Alllí se escucha lo de sevillanos, yonkis y..." Pero eso es otro tema. Gente más preparada y civilizada claramente la de esa parte de la capital. Cuando vas al campo del Atlético la cosa cambia, allí de nuevo aparece el racismo, apenas a unos kilómetros de la Castellana. Sin duda es un racismo selectivo, no afecta a todos por igual. No sé si estaremos de acuerdo a estas alturas. Creo que ya el matiz me desautoriza como persona. Estoy casi seguro de que muchos de esos miles de racistas que le gritan a Vinicius se tomarían copas con el chaval negro de su equipo y hasta lo querrían como cuñado. Vuelvo a dudar si es realmente racismo lo que observamos en el fútbol y en concreto con este chaval. Peor persona seré. Yo lo que veo es alguien que interactúa fatal con la grada contraria, en la práctica de su profesión, que tiene un escudo protector especial, una bola extra, y que además cuenta con el respaldo de mucha gente que es como él, madridista. Mucha es mucha. Políticos, mandamases, empresarios, ciudadanos... Y claro, el escudo sirve para tapar lo otro de lo que no se quiere hablar. No se quiere decir nada de ese aire de superioridad y este trato especial del que gozan algunos por ser del Real de Madrid. Yo lo que observo, como muchos en lo que queda de España, es esa polarización radical, el madridista cada vez se siente más perseguido (tiene cojones) y al resto del mundo cada vez nos da más coraje. Percibo que sí, que hay una especie de 'racismo contra lo blanco' muy creciente, a la par que sus incondicionales también crecen en su radicalismo o integrismo deportivo. El tema es muy menor con respecto a la cuestión de fondo, porque si de verdad somos un país racista es un tema prioritario, pero prefiero discutirlo a raíz de una vivencia de una chica o chico gitano que no es tratado del mismo modo que un ario-castellano o de una magebrí en un invernadero... o mil situaciones de la vida real. Cuando pasa lo de Vinicius prefiero no mezclarlo con lo que de verdad es importante. Y para rematar mi inmolación pido una reflexión, que pasaría si en Sevilla, el próximo partido, hubiera una pancarta que rezara así: "Vini, hermano, yonki y...".