muchodeporte.com : Víctor Fernández

Poli bueno, poli malo

Me levanto y me voy
Víctor Fernández
Víctor Fernández
14/06/2019

La última ciclogénesis que el propio Betis ha generado deja al descubierto el verdadero plan de los que mandan en el club desde hace ya un puñado de años: agarrarse al apreciado trono aunque haya que matar por el camino dragones y al propio Rey de Heliópolis. Para lograrlo están dispuestos a ejecutar acciones menores, como acudir al despacho de los directores de los medios con unas carpetitas para amedrentar al periodista que se salga del pensamiento único marcado a fuego, y también actos extremos como el de humillar a la persona más vinculada con el escudo verdiblanco: Lorenzo Serra Ferrer. Sin duda, nadie puede dudar del arrojo y atrevimiento de estos dos dirigentes. Hay que tenerlos bien puestos para encerrar en una habitación a Serra Ferrer, decirle que lo ha hecho todo mal, arrojarle siete folios de deshonra y anunciarle a los béticos que esto es lo que hay.

Lo curioso es como han puesto en marcha la guillotina, acudiendo a algún cursito de ejecutivos para llevar a cabo una estrategia que es más antigua que el hilo negro: Poli bueno, poli malo. Por las acusaciones de Serra Ferrer, que señaló directamente a López Catalán como el verdugo, se desata una duda en torno a Ángel Haro, a quien le restó toda responsabilidad de su marcha. Una de dos, o Haro se ha convertido en un muñequito en manos del que verdaderamente manda o, simplemente, se ha prestado a la interpretación en esta película del poli bueno. Cada uno que saque sus conclusiones, pero es difícil asumir que el poderoso y exitoso empresario Haro se haya limitado a lamentarse y lloriquear ante Serra Ferrer. Haro y Catalán lo utilizaron cuando vieron peligrar el sillón presidencial. Ahora les han abierto las puertas de la humillación. Se imaginan que un solo periodista hubiese tratado de esa forma a Don Lorenzo. El club hubiese utilizado a la masa bética para destrozar al pobre plumilla, una masa que ahora no sabe con quién desatar su ira. Cada uno que aguante su vela en este Juego de Tronos. 


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