Una pionera con mayúsculas

J.A.J. 24/06/2021

A todos nos suenan los nombres de Mireia Belmonte, Lydia Valentín, Gemma Mengual, Teresa Perales, Amaya Valdemoro, Arancha Sánchez Vicario, Vero Boquete, María Vasco… Chicas que fueron o son referencias y espejos en los que mirarse en sus respectivas disciplinas deportivas. Sin embargo, hay otras menos conocidas que son igual de buenas que todas las anteriores. Aunque no salgan en los periódicos ni sean noticia por apostar por deportes minoritarios. En nuestro entorno tenemos la suerte de contar con una de esas chicas que lo dan todo en su deporte, aunque sus logros apenas sirvan para ser valorados por su entorno o por especialistas en la materia. Hablamos de Eva Sanz Muñoz. Sin temor a equivocarnos, toda una referencia en el Mushing Femenino, local, regional, nacional… y puede que muy pronto en el continental.

Deportista desde niña, encontró el Mushing casi de casualidad. Un día se inscribió con su perro ‘Guti’ a un Canicross y desde entonces lo ha convertido casi en una filosofía de vida. Esa chica que competía de manera más que aceptable en gimnasia rítmica, que se abrazaba al running para compaginar el deporte, el trabajo y la vida en familia es muy culpable de la expansión de un deporte desconocido para muchos, pero adictivo hasta extremos insospechados. Y no lo decimos únicamente por ocupar un cargo de relevancia en la Federación Andaluza de Deportes de Invierno o en el Dunhuellas Mushing. Su trabajo desinteresado por abrirle un hueco entre nosotros, en un entorno que no ayuda demasiado, no tiene precio.

Hablar de sus logros personales, junto a Nora y Arya, sería un no parar. Títulos locales, regionales, nacionales… y con la opción más que probable de representar a España en el próximo Campeonato de Europa. Algo que, salvo que las hemerotecas digan lo contrario, no ha logrado ninguna andaluza hasta la fecha. Pero medallas al margen, puede que uno de sus principales reconocimientos haya sido el de haber abierto una puerta para que muchas chicas se introduzcan en un mundo mayoritariamente de hombres hasta hace relativamente poco tiempo. Vamos, como venía sucediendo en caso todos los deportes. Una pionera que sueña con ver algún día al Mushing formando parte del programa olímpico.

Eva Sanz Muñoz, un nombre que para el gran público resulta desconocido, pero que cada vez que la competición lo requiere deja muy alto el pabellón de nuestra tierra. Esfuerzo, dedicación, muchas horas de entrenos no actos para cualquiera, amor por los perros… Calificativos que lo dicen todo de una pionera, de una referencia en el deporte femenino nacional.