Natación: Martínez Tajuelo, a la caza de su mejor brazada

Lucas Haurie 30/12/2019

La competición, un estilo de vida más saludable y el entrenamiento en la piscina le dieron un vuelco a la vida de Miguel Ángel Martínez Tajuelo, uno de los veteranos del deporte paralímpico español. Desaparecieron los nervios y la tensión, propios del novato. Este campeón jiennense perdió kilos, ganó agilidad y borró de su mente frases del tipo "yo no puedo hacer...." y las cambió por el "vamos a probar e intentarlo". La natación se ha convertido en una forma de vida. “Gracias a ella he mejorado en los aspectos que necesitaba mejorar para continuar caminando hacia delante en mi camino”. 

Su éxito no tiene una receta secreta. Su entrenadora Esperanza Jaqueti le dio consignas y confianza. “Todo lo que sé sobre natación se lo debo a ella. Yo siempre digo que los resultados que consigo en la piscina son al 50% de los dos. Sin su planificación de los entrenamientos, sabiduría y experiencia en la natación no habría llegado hasta aquí. Lo mejor es que Esperanza se ha entregado en mi preparación al 100%, lo suyo es pura vocación”, se explica Martínez Tajuelo, uno de los frutos del Club Natación Fidias, que realiza una labor impagable con deportistas con discapacidad en Córdoba.

Una prueba en el Open de Murcia, cuando consiguió la mínima para los Juegos de Pekín 2008, fue el principio de todo. Le abrió muchas puertas y un nuevo abanico de amistados que ha conocido en España y en todo el mundo. “He visitado muchos lugares y todas las personas me han enseñado algo nuevo que me ha servido para el futuro y para superarme a mí mismo”, comenta.

Ricardo Ten, en ocasiones compañero de habitación en las competiciones en las que han coincidido, es su referente, quien le marca el camino de la ilusión, nuevos objetivos y consejos para encarar la siguiente meta. Con él se estrenó en los relevos y escuchó por primera vez el himno español al colgarse una medalla. También le instruye en el proceloso mundo de las redes sociales, mediante las cuales Tajuelo desea compartir sus vivencias con otros deportistas paralímpicos que están desorientados, como le ocurrió a él en sus inicios. 

Con 22 años vislumbró un nuevo sentido a la vida. Padece artrogriposis, pero lejos de ser un obstáculo le ofreció una manera de superar retos. Su rutina es entrenamiento matinal en el gimnasio, sesión de piscina, descanso al mediodía para comer y nueva tanda de series en el agua. Cuando se acercan los campeonatos, la motivación aumenta en Martínez Tajuelo, que agradece las ayudas en forma de becas del Plan Adop, así como las colaboraciones de instalaciones municipales de Córdoba, de la universidad y otros centros privados. 

Su palmarés es interminable con numerosas medallas en campeonatos del mundo y europeos. En septiembre disputó cinco finales en los Mundiales de Londres. Echa en falta más competencia en España, donde arrasa desde 2008, para tener una mejor preparación en los eventos internacionales y tiene como desafío, por fin, celebrar un triunfo en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020, ya que se le acumularon los diplomas en Pekín 2008, Londres 2012 y Río 2016, aunque a todas sus marcas les da valor, con o sin medalla.