Una joyita con nombre propio

Bernardo Ruiz 18/09/2023

Es el chico de moda de la División de Honor juvenil, la categoría de oro del fútbol formativo estatal. Su rostro de niño noble y su pelo rubio son inconfundibles cuando camina con ropa de sport. Con su gesto afable se ha ganado el cariño del vestuario del Sevilla FC y con su talento y su demoledor acierto en el área enemiga se ha apoderado de los elogios de un torneo en el que ejerce de killer insaciable. 

Es el retrato robot de Iker Villar Mendoza, Iker Villar, un delantero que a sus 16 años ya asume de forma natural la etiqueta de heredero de Isaac Romero, el chaval que se ha reivindicado con una auténtica exhibición en el primer tramo de la temporada en el grupo IV de la Segunda Federación. Iker Villar nació en 2006 en Fuentes de Andalucía, de cuyos escalafones inferiores emigró cuando era benjamín a la factoría del SFC.

En la Carretera de Utrera se forjó como un delantero zurdo inteligente, potente y especialmente peligroso con espacios. Una atractiva carta de presentación gracias a la que lució la escarapela de internacional sub 16 con España. Ahora, con la madurez en el Liga Nacional como aval, el ‘9’ se ha exhibido en la División de Honor, un certamen en el que brilla gracias a la apuesta y al modelo de Lolo Rosano.

Villar suma 3 goles en los 3 primeros encuentros de la Liga y en el último compromiso ante la UD Tomares facturó una diana meteórica después de firmar un imparable lanzamiento desde una distancia prudencial. Con su condición de juvenil de segundo año, el ariete fontaniego ha sido capaz de batir el arco enemigo en los envites ante UD Tomares, Córdoba y La Cañada Atlético. 

Su exhibición en el San Sebastián de Tomares confirma su estado de gracia en zona hostil, ya que ha sido capaz de facturar 3 dianas en los 197 minutos que ha contabilizado hasta la fecha durante la Liga. Repite el rito de la celebración cada 65,6 minutos. Es de Sevilla, canterano y con el gol en la sangre. Iker Villar, el fontaniego más ilustre.

Foto: Edu Suárez