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Como si la amnesia fuese real...

Copa de Andalucía

Bernardo Ruiz
Bernardo Ruiz
04/06/2022
El Osuna cede ante el Riotinto en la ida de los 1/8 de final (2-1)”

Con la sensación de haber claudicado por detalles. Con la plena certeza de haber cedido una exigua derrota por haber ajustado de forma precipitada el telescopio en la trinchera. Por señales de cansancio físico y psicológico. En la ida de los 1/16 de final de la Copa de Andalucía un sábado de junio. Con el alivio de que el Raúl Carrosa dictará sentencia en la vuelta y con la creencia de haber firmado la rendición provisional en una refriega sin fuego de artillería.  

Desde el inicio, Domingo López apostó por un 1-4-4-2 con Limones y Ezequiel en la medular y Gerard y Palop en la definición. El plantel de la Sierra Sur optó por la clarividencia de Moyita, que figuró en el carril exterior, y la insistencia de Muri para generar peligro en la zona enemiga. Sin embargo, el arquero anfitrión, Alberto, no hubo de recurrir a su mejor versión para neutralizar los conatos del oponente en los primeros compases.

El Riotinto, con un peligroso Pata, generó los únicos mensajes inquietantes del capítulo inaugural. Peña exhibió una indisimulada sonrisa después de aliarse con la fortuna tras una ráfaga de Sergio Pollo y Abel. El envite languidecía en el acto inicial cuando Pata multiplicó la confianza de la tropa local. El atacante albirrojo cabeceó a la red un servicio traicionero de Polaco. El gol disminuyó el ritmo del Riotinto, que acumulaba un mes de asueto tras el cierre de la Primera Andaluza de Huelva.

Moyita asió entonces la bandera de la raza y la fe y condujo con criterio en dos latigazos que Gerard trató de rentabilizar. El jovencísimo delantero ursaonense, aún juvenil, buscó el espacio y el cuero en dos desmarques de ruptura que significaron dos avisos alentadores para la expedición visitante. Y, cuando el árbitro revisaba su reloj, Muri pugnó con rabia por un balón sin destino y fijó el telescopio para asociarse con Gerard, letal en el segundo palo y certero en la muerte súbita. 1-1 y nuevo guion para el segundo período. 

El escenario no presentó ninguna variación tras la reanudación. El laboratorio de Domingo López adquirió una relevancia absoluta en una ocasión de Palop que el viento desvió al infinito. Con el choque en tiempo muerto, el técnico de la formación de la Sierra Sur recurrió a Pedro, centímetros y brega, y sacrificó a Gerard, velocidad y talento. El Osuna mutó a una tropa intimidatoria y agresiva en los balones aéreos.

El respeto mutuo y la suma cautela en la interpretación de los códigos del juego propiciaron que el duelo consumiera minutos sin aparentes signos de rebelión. Pedro se disfrazó de recluta insumiso y multiplicó la solidaridad de Peroli. Pero, de repente y sin el talentoso Moyita en el césped, Sergio Pollo cazó un servicio sin peligro para ajusticiar a Peña y firmar un 2-1 que dinamitaba la eliminatoria. El cruce se resolverá en el Raúl Carrosa de Osuna. En la Villa Ducal. En apenas una semana y con el aliciente del pasaporte para los 1/8 de final de la Copa de Andalucía, la pintoresca antesala de la ronda interterritorial de la Copa del Rey, a subasta. Sin trucos ni trileros. Un premio real que requiere de un último juego sin normas ni reglas.