Cien años del primer partido de la Selección en Andalucía: España-Portugal, el pasado nos sitúa en el futuro

Paco Cepeda 01/12/2023

Cien años se cumplen el 16 de diciembre del primer partido de la selección Española en Andalucía. Fue ante Portugal (3-0), precisamente el partido que se sitúa en el número 12 de los encuentros de la selección en toda su historia. Precisamente el 12. Precisamente Portugal. Con el debut de dos sevillistas, los primeros también que fueron convocados defendiendo una camiseta de un club andaluz, el Sevilla FC, el malogrado Spencer y Herminio. El escenario fue el primer Comunale sevillano. Se recordará el encuentro por muchos motivos, uno más el primer triplete de un jugador con la camiseta española, ya que los tres goles fueron de Zabala. Zamora; Pololo, Herminio; Samitier, Sancho, Peña; Piera, Spencer, Zabala, Alcántara y Del Campo adiestrados por Paragues fueron todos los que jugaron.

El escenario fue el "Campo Reina Victoria", que se empezó a construir en 1917, a la par que una frenética actividad inmobilaria propia de la actividad comercial de un Puerto que crecía sin parar y necesitaba las insfraestructuras adecuadas para afrontar el futuro de la capital de un región entonces con mucha actividad económica y de la preparación para la Exposición Iberoamericana. El torero Juan Belmonte, cuando no gozaba de la fama que lo encumbró, fue uno de los miles de trabajadores que se necesitaron para tanta obra. Chaves Nogales recoge en su biografía cómo lo vivió Belmonte: "Como no había oficio, arte ni industria para ganarme la vida, tuve que colocarme de jornalero en la obra más penosa que había entonces en Sevilla. Se estaba haciendo entonces una corta en el Guadalquivir para desviar su curso, y allí conseguí que me admitieran como peón a destajo; mi obligación era darle aire a un buzo que trabajaba en el fondo de un pozo. En aquella obra gigantesca trabajaban, como yo, todos los desgraciados de Sevilla… Fui un jornalero más en aquella legión de proletarios que arañaban tenazmente la tierra para abrir un nuevo cauce al viejo Betis".

Cuando al Sevilla Football Club le fue comunicado que debía abandonar las instalaciones del Mercantil en la que disputaba sus partidos como local, trazó su traslado. Ubicada en una parcela aledaña al actual Paseo de la Palmera, entonces Paseo de la Reina Victoria, la instalación no recibe un nombre de manera oficial, sino que la costumbre de llamarlo así termina imponiéndose en el acervo popular, primero, y más tarde en los papeles.

Al contrario que el primitivo feudo sevillista, que no dejaba de ser un campo efímera, La Victoria contó con graderíos fijos desde su inauguración. Así lo demandaba la creciente afición al fútbol, un deporte no obstante todavía no asentado en la sociedad, como demuestra que en los periódicos de la época, en muchas de las informaciones previas o de situación, era costumbre resumir el reglamento del juego para los no iniciados.

El primer partido se celebró oficial que se disputó en el Reina Victoria fue el 20 de octubre de 1918, entre el Sevilla y el Unión Sporting madrileño, cuando el recinto sólo contaba con una pequeña grada de madera tras una de las porterías y dos montículos, a modo de 'pelouse', en los laterales. Fue durante un decenio la casa de los sevillistas y allí se cimentó su dominio regional con nueve títulos en la Copa de Andalucía y la celebración de la primera semifinal de una Copa nacional, perdida contra el Barcelona.

Sin embargo, los dos días de gloria del Campo de la Victoria no llegarían de la mano de su por entonces inquilino habitual, sino con dos eventos que quedarán para la historia: el 16 de diciembre de 1923, España jugó allí su primer partido en Andalucía, en el que doblegó por 3-0 a Portugal e inició una larga racha de casi siete decenios de imbatibilidad en Sevilla, ciudad en la que la selección nacional firmó varias gestas con la ayuda de un público fiel que se ganó el reconocimiento federativo de 'Jugador número 12', que se encargó de popularizar la impagable pluma de José Antonio Blázquez.

No mucho después, en 1925 se disputó la final de Copa del Rey, que por aquellos años empezaba a deslocalizarse de su sede habitual de Madrid, en la que 8.000 entusiastas seguidores –ya ubicados en una grada que rodeaba todo el terreno de juego– presenciaron el triunfo del Barcelona sobre el Arenas de Guecho, uno de esos equipos de éxito en la prehistoria del fútbol que fueron perdiendo fuelle pero no orgullo.

Desde entonces, la historia de la selección en Sevilla se ha hecho cada vez más presente y memorable. Por detrás de Madrid, es la ciudad con más partidos jugados. Andalucía ya ha recibido en 87 oportunidades a la selección española, siendo la Comunidad española con más encuentros, por delante de Madrid. La relación permanece intacta. Sólo puede ir a más, porque se nos viene un Mundial en 2030, junto a Portugal y Marruecos, que por razones geográficas, culturales, económicas y deportivas coloca de forma muy natural a Andalucía en el eje del evento.