Así jugaron los futbolistas del Sevilla

Paco Cepeda 14/01/2018

Sergio Rico: No se salva nadie. Está muy tocado y no gana ni un partido desde su puesto. 

Mercado: Defiende poco, se desdobla mal o fatal. ¿Hasta cuándo?

Kjaer: Siempre aparece en la foto mala. Una estatua que tiene cara y cuerpo de central, pero que no defiende ni manda ni es jefe de nada.

Lenglet: Muy difícil no volverse loco con la banda que tenía a derecha e izquierda. 

Carole: En realidad no debe ser futbolista. Tiene que ser un primo de un amigo de Óscar Arias. No podemos encontrar otra explicación. Me recuerda a Lucio Wagner. 

Pizarro: No puede ser verdad lo que se le ve en cada partido. No puede tener menos calidad. Si a este jugar lo despidieron de México como si se marchara Gullit, es que allí o no ven o son ciegos o el nivel es bajísimo. 

Geis: Es pelotero, pero muy lento para lo que pide ahora mismo el Sevilla, que necesita más que nunca fuerza y chispa.

Banega: Se parece cada día más al Banega de las cosas raras en el ordenador, de las lesiones con un coche... Su calidad no le da ya para tapar el resto de cosas que hace mal o que no hace. 

Jesús Navas: Mil maneras de centrar sin que pase nada. También se ha especializado en disparos ridículos. Qué pena dar ver a un mito de esta manera. 

Nolito: Cada día más lento, menos chisposo. No encara casi nunca y cuando lo hace es para perderla. Hubo una jugada en la que pidió penalti que es de jugador acabado.

Ben Yedder: No le piten, por favor, que sacan a Muriel. 

Sarabia: Otro contagiado. Quiere hacer todo y le sale poco o nada. 

Muriel: Unos minutos más de esos en los que no se sabe de qué juega ni a qué juega.

Corchía:  Un cambio de esos que te dejan muerto. Más culpa del entrenador que del jugador, que tampoco dice nada.