Pablo Alfaro lo borda con el Mirandés

José Antonio Jiménez 14/05/2018

Un equipo como el Sevilla FC tiene la obligación de decantarse por un técnico de cierto caché y con experiencia en equipos de nivel. Lo normal, salvo que haya que recurrir a hombres de la casa, como ha ocurrido con Joaquín Caparrós en esta recta final de la 17/18. Sin embargo, siempre está la posibilidad de aportar por entrenadores jóvenes, que hayan acumulado buenos resultados, que estén bien vistos por los aficionados y con ganas de comerse el mundo en la élite. Un técnico, por ejemplo, como Pablo Alfaro.

Y es que el aragonés ha sido capaz de acabar la Fase Regular del G. II de Segunda B en primer lugar con el Mirandés (76 puntos, tras acumular 23 triunfos, 7 empates y 8 derrotas). Un conjunto que tendrá dos vías para retornar a Segunda división. Pablo Alfaro se hizo cargo del cuadro burgalés el curso pasado en Segunda, cuando el descenso era ya irremediable. Esta campaña, desde el arranque, ha mantenido a los suyos en la zona noble de la tabla hasta acabar en lo más alto tras el 1-0 ante el Guernika.

Pablo Alfaro ha sido vinculado más de una vez con el banquillo del Sevilla Atlético. Incluso con el del División de Honor de Juveniles cuando el exitoso preparador del Mirandés estaba en el paro. Un profesional tan querido por el sevillismo, que incluso defendiendo otros intereses nunca ha escondido su sentimiento rojiblanco.

A ver si excentral del cuadro blanco consigue el ascenso con el Mirandés. En su primera experiencia, cuando se sentaba en el banquillo del Leganés, se quedó a las puertas de la División de Plata de nuestro fútbol tras no haber sido capaz de eliminar al Lleida. A sus casi 50 años, seguro que por este camino algún día le llega la oportunidad de sentarse en el banquillo del conjunto que defendiera en el campo entre 2000 y 2005.