0-0: Pobre de solemnidad

Lucas Haurie 19/09/2021

Hasta este firmante, que de fútbol entiende lo justito o más bien nada, es capaz de comprender que la acumulación de delanteros no favorece necesariamente el juego ofensivo. Que si los sistemas elásticos, que si la ocupación de espacios, que si la presión escalonada, que si los mapas de calor, que si la abuela fuma, que si blablablá… Sucede, no obstante, que ciertas cuestiones trascienden el plano técnico. A ver, en el minuto 85, Lopetegui quitó al Papu Gómez para meter a Karim Rekik. Apesta a conservadurismo (a jindama) que tira de espaldas. Y es cierto que nada más salir el neerlandés, Rafa Mir tuvo la única (¡la única!) ocasión sevillista de la tarde, pero no es menos cierto que fue al contragolpe y el partido acabó con los tres centrales visitantes despejando córneres y Fernando haciéndose el muerto para perder tiempo. La Real Sociedad atacaba en esos momentos con Julen Lobete y Germán Valera. Ojo al dato.

Hubo un baloncestista en el Caja San Fernando, creo que aún se llamaba así, que llegó precedido por su fama de gran reboteador, el mejor de la liga francesa, que confirmó en la ACB. Vasco Evtimov fue el rey de las capturas, según recogió la estadística, pero en San Pablo se maliciaban que el zorro inflaba sus números fallando adrede bandejas solo bajo el aro, para poder sumar un rechazo más, o yendo como un endemoniado a por los tiros libres errados por el rival, aunque no hubiese nadie al rebote ofensivo, a costa incluso de clavarle el codo en la tráquea a un compañero, tal era su ímpetu. ¿Es posible que Bono se haya conchabado con Diego Carlos para disparar su eficiencia en los penaltis?

A los veinticinco minutos, cuando el partido era una de esas nanas ideales para la siesta dominical con las que el Sevilla castiga al telespectador, el coloso brasileiro metió la mano ante un control de Sorloth. Mateu no vio el claro penalti que sí percibió su compañero ante el monitor y Bono, por cuarta vez en cuatro días, se plantaba a once metros del balón. El consumado especialista que es Oyarzabal camufló su disparo como suele, pero más aguantó el quebequés para repeler con el pie y volver a salvar a su equipo, igual que lo salvó poco después en un chut a quemarropa de Isak.

Se preguntará el lector que por qué no se reseña acción alguna del Sevilla en toda la primera parte y la respuesta es sencilla: porque en esos 45 minutos iniciales hubo tantas jugadas reseñables de los sevillistas en el remozado Anoeta como de los futbolistas del Cantarrana. Las entradas de Delaney y Lamela por Joan Jordán y Suso no variaron la desesperante premiosidad del fútbol de los colorados. El argentino y Rakitic, ambos tarjeteados, dejaron su sitio en el descanso a Óscar y Ocampos, y cierto aire de optimismo soplaba en el vestuario visitante, habida cuenta de la paliza física que se llevó el jueves en Eindhoven la Real, que ya había perdido por lesión a Isak. 

Nada pasó, excepto que el Sevilla sumó un empate que puede valer por sí mismo, puntuar en el campo de un rival directo, pero que nos deja helados adicionado a las igualadas ante Elche y Salzburgo de las últimas comparecencias. La segunda mitad ofrecía muchas circunstancias coadyuvantes para una victoria si, acaso por intercesión divina, los chicos de Lopetegui hubieran mostrado una mínima capacidad para generar peligro más allá de un adelantamiento funcionarial de líneas y de media docena de acciones de estrategia que habrían sido ocasiones de haberse contado con una preparación adecuada, un lanzador competente y algún rematador avieso. Como nada de eso había, el único sobresalto para Remiro fue un tiro seco con poco ángulo de Rafa Mir en un contraataque. Muy poquito para un aspirante a… ¿A qué? 

Ficha técnica:

Real Sociedad (0): Remiro; Gorosabel (Zaldua, minuto 74), Aritz, Le Normand, Aihen; Zubimendi, Merino, Sorloth (Guevara, minuto 74); Oyarzabal (Lobete, minuto 58), Portu (Valera, minuto 74) e Isak (Januzaj, minuto 38).

Sevilla FC (0): Bono, Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos, Marcos Acuña, Fernando, Rakitic (Óscar, minuto 46), Delaney (Joan Jordán, minuto 60), Lamela (Lucas Ocampos, minuto 46), Papu Gómez (Rekik, minuto 85) y En-Nesyri (Rafa Mir, minuto 70).

Árbitro: Mateu Lahoz, valenciano. Amarillas para Rakitic, Lamela, Aihen, Januzaj y Óscar.