Y además, fútbol

Vía de Escape

Paco Cepeda 12/05/2023

Pese a los incrédulos que todavía no se han enterado, ni se van a enterar, de que el fútbol, el deporte, el alto rendimiento, el estar cansado o fresco, depende del talento (físico, táctico o técnico), pero también del entorno, la importancia del logro y por tanto de la fortaleza mental y la creencia, lo cierto es que la mayoría de la gente leida e instruida sabe que hay unos intangibles que cada vez lo son menos porque se pueden medir y trabajar que te ayudan al triunfo o te llevan a la derrota. Hay ejemplos, que cada uno se lleve el que más le interesa a la mente, que demuestran claramente que no siempre el mejor se convierte en el rey de una competición. Para evitar las mediocridades pueblerinas me voy a fijar en Rafael Nadal Parera. Todo el que se haya comido una paquete de pipas enfrente de una pista sabe que tiene mucho más tenis Federer y Djokovic que el fenómeno de Manacor. Pero como la cosa se ponga tensa, como ese mejor tenis no fluya, poco a poco ese titán que juega el último punto mejor que el primero te hace la pirula y se lleva el torneo a esa centro de alto rendimento que cada día se parece más a la NASA que tiene al lado de su casa. Vaya crack también en eso. Haciendo empresa y futuro al lado del salón del chalet. 

Ahora viene la parte en la que el mediocre dirá que es Biriperiodismo asegurar que el Sevilla lleva 20 años sabiendo mejor que nadie surfear con éxito por la Europa League. Por lo visto da igual ganar con Palop que con David Soria, con Daniel Alves que con Mariano. Factores deportivos, circunstancias... Le llaman algunos. Muy bien. No hay problema. No existe la energía no medible. No pasa nada, cada uno que enfoque como quiera.

Toda esta parrafada va más para uno, él lo sabe, que para muchos. Y eso que me refiero a un señor ni mediocre ni simple, pero está cegado en un par de temas que no ve. Lo que va para más gente, donde no paso facturitas, es que el Sevilla, además de todo eso que algunos no ven, ha enseñado muy singularmente ante el Manchester United en el Sánchez Pizjuán y ante la Juventus en Turín que tiene fútbol. Me duelen los ojos cuando lo escribo. No me lo creo, no lo imaginaba, pero ha pasado. Dos señores partidos de fútbol en dos momentos clave, históricos. Y eso, además de todo lo demás, es lo que Mendilibar puede vender perfectamente dentro de ese vestuario engorilado que el jueves va a vivir otro partido fuera de categoría. ¿Eso sí es palpable no? Luego, pasará lo que tenga que pasar, pero el Sevilla tiene fútbol, ahora mismo, y todo lo demás para competirle muy en serio a la Juventus. La derrota también entra en la ecuación, por supuesto. Pero las vísperas no se pueden ni se deben aguar. Un besito, mano derecha e izquierda. Va por tí.