Una hora de fuelle y otro balón a casa para Messi

La fábrica de humo

Miguel Ángel Chazarri 23/02/2019

Pues pasó lo de tantas veces, sólo que esta vez el Sevilla llevaba razonablemente bien el partido. De hecho en la primera parte fue mejor. Se posicionó atrás -demasiado atrás, eso sí- sin conceder peligro. El Barça estaba atascado. Las salidas del Sevilla eran limpias, algunas de ellas de gol. De hecho al descanso se fue crecido, ganando 2-1, habiéndole marcado dos goles a un gigante muy dubitativo. Pero ese gigante tiene a Messi, que definitivamente es el azote de todos los equipos y especialmente del Sevilla. Otro balón para su casa y la asistencia del cuarto a Luis Suárez. Casi nada. El Sevilla cedió de forma lenta pero sin freno. La segunda parte que hizo valió poco, pues no recordamos ni una sola intervención de Ter Stegen. Demostrado está que con los grandes, cuando no los inquietas atrás, es cuestión de tiempo que se lleven la victoria. Fue justo lo que ocurrió, que Messi acertó y se acabó la historia.

A ese tono bajo contribuyeron de manera fundamental los cambios, dos de ellos obligados. La aportación del Mudo, Roque Mesa y hasta de Amadou, aunque éste último menos, terminó de hundir a un equipo que es una máquina de recibir goles en la recta final de los encuentros. No puede, no le van las piernas. Y no porque esté mal preparado, supongo que no será así, sino porque carece de calidad física. Vean el partido del descansado Banega. Qué mala pinta me dio con esas medias bajadas desde el minuto uno… Cierto es que Machín tuvo la oportunidad de agitar más el partido aprovechando, por ejemplo, el cambio de Rog. Pudo meter a André Silva para inquietar a los centrales del Barça, que en la segunda parte se pudieron acostar. Sacó a mediocentros sin pulso y Messi remató su gran obra. Pese a que recibir cuatro goles es un duro correctivo, no hay mucho que achacar a este partido. No me olvido del sonrojante 6 de 27 firmado, que no es poco. Si no llega a ser por Europa, no hace falta decir cuál sería el debate en estos momentos. El Sevilla ya no gana dentro y fuera hace el canelo. Por tanto, queda desalojado del cuarto puesto.