A ritmo de 'biscotto', pero sin 'biscotto'

La fábrica de humo

Miguel Ángel Chazarri 18/05/2019

Se jugó a ritmo de partido de amigotes, pero al final el resultado no fue el esperado. Ganó el Sevilla, lo cual de alguna forma me causó sorpresa viendo cómo se las gastó durante casi todo el partido. No sé qué pasará en Bilbao. Me imagino que habrá crítica, porque mira que no apretarle lo más mínimo a este Sevilla… Mira que no ganarle a un Sevilla que empezó con Rog y Amadou de mediocentros y terminó con Gnagnon y Amadou en dicha demarcación… No sé, el Athletic jugó como si quisiera evitar las molestas previas y al final lo pagó. El Sevilla aprovechó la candidez vasca y logró un triunfo que amarró el sexto puesto. Menos mal. Ya de por sí me entusiasma poco la Europa League. Si encima hubiera tocado ver a todo un pentacampeón penar en julio por esos campos de Dios... Bastante deprimente. Y encima, con la excusita del cansancio nuevamente en vigor para toda la temporada. Mejor ser sexto, verano limpio y tres meses justos para que Monchi arregle las dos chapuzas de planificación de los dos últimos veranos.

A Caparrós se le aplaudió al final del partido y en parte lo entiendo. El sevillismo siempre le estará agradecido. Es todo un personaje, la afición lo siente como suyo. No creo que haya cometido ninguna tropelía en el banquillo. Más o menos ha sostenido al equipo. Ya es hablar por hablar, pero tal y como veía la situación, creo que con Machín la caída hubiera sido mayor. Donde de verdad ha obrado mal Caparrós es en los despachos, tarea para la que avisó que no se sentía preparado. Ahí sí ha metido la pata, pues ha hecho un equipo bastante malo. El Sevilla no ha podido quedar mejor clasificado porque cuenta con un grupo muy reducido de buenos jugadores. La mayoría de futbolistas es para ir colocándolos durante el verano con mucha prisa y nada de pausa. Así que termina una temporada no de hundimiento, no de debacle, pero sí decepcionante. El Sevilla no ha dado la talla en ninguna competición. Se queda a un triunfo de la Champions. Nos acordamos ahora del ridículo de Vigo, del ridículo de Girona, del ridículo reciente ante el Leganés… Ya es para nada. Y además, seamos francos, ha quedado cuarto el equipo que tenía mejores futbolistas, el Valencia CF.