Pellegrini y el estilo

La fábrica de humo

Miguel Ángel Chazarri 03/07/2020

Mientras se acumulan los sainetes, y ojito que esto aún no ha terminado, el Betis busca entrenador. Por ahora, va ganando Pellegrini. Lo tengo por un buen técnico. Ha pasado por banquillos mastodónticos, como el del Madrid y el Manchester City. Allí no trabaja cualquiera, López Caro aparte. Hay que tener un gran nivel para alcanzar tan altas cotas. Su caso no es el del típico técnico al que le toca la lotería y de repente se ve ahí, cual polizón. No, Pellegrini se ha labrado una gran carrera, forjada también en equipos medianitos. Casi jugar unas semifinales de Champions con el Málaga es mucho. Casi jugar una final de Champions con el Villarreal, más aún.

La cuestión con Pellegrini es detectar si ya viene de vuelta, si se tomaría esta etapa en Sevilla como una estancia apacible cerca de Marbella, donde tiene casa. Cerca de donde pueda practicar su deporte preferido, el golf. Tiendo a pensar que quien ya ha pasado por China está en ese plan, pero seguro que habrá casos que me dejan por embustero. ¿Tendrán López Catalán y Alexis tan fino el olfato como para olisquear en qué momento profesional y vital se encuentra Pellegrini? Lo dudo.

Mientras se elige y se habla, también se debate y mucho de un asunto que genera confusión: el estilo. Algunos piden cambiarlo, claro que para cambiarlo la primera condición que se debe cumplir es tenerlo, y ahí el actual Betis parte de cero, pues lamentablemente lleva un año sin entrenador. Ha jugado a la nada desde el principio de temporada. Es una broma especialmente atrás y también arriba. Si viene un buen entrenador, organiza el club, ficha a cinco o seis titulares, acierta y gana, a la gente le dará igual que sea con más o menos toques. Tal debate es viejo y obedece más al gusto de cada uno, resumido en una especie de Guardiola vs. Simeone. A mí me gusta más Guardiola, pero a la vista está que de las dos formas se puede ganar. Cuestión de hacerlo bien.