Pellegrini, rey del Catenaccio: de 10 goles encajados en las cuatro derrotas a solo tres en la serie siguiente

Rafael Pineda 06/05/2024

"El Catenaccio palía una supuesta desventaja física de los italianos, fruto de la posguerra, donde había de replegarse, defenderse y atacar de contragolpe", afirmaba Gianni Briera, considerado el mejor periodista deportivo de la historia de Italia después de ser partisano en la Segunda Guerra Mundial. Si hay una forma de jugar al fútbol que caracteriza a Italia es el Catenaccio. Y Manuel Pellegrini tiene sangre italiana. 

Se permite la licencia y el apunte sobre el Catenaccio para explicar una de las razones, quizás la principal, que explica la mejoría del Betis en las últimas cuatro jornadas. Un 10 de 12 puntos que ha catapultado las opciones europeas del equipo verdiblanco. 

El Betis, tras encajar 10 goles en la horrible serie de cuatro partidos derrotados, ha recibido nada más que tres en los últimos cuatro encuentros. Uno frente al Celta en el tramo final del partido y otros dos como consecuencia del balón parado (un penalti en Valencia y un remate de Kike Salas en el derbi a la salida de un córner). En Pamplona, ante Osasuna, el Betis dejó su portería a cero, algo que no hacía desde hacía ocho encuentros, en el cero a cero en el Benito Villamarín frente al Alavés.  

El equipo de Pellegrini, por lo tanto, ha vuelto a defender tras los dos goles encajados contra el Atlético, los tres del Villarreal, los dos del Rayo y los tres del Girona. Las claves están en una mentalización de todos los jugadores y en la presión adelantada del Betis en todos estos encuentros.  

La defensa verdiblanca comienza en el campo del rival y eso es algo que agradece la defensa. El juego del Betis deja que desear, sin duda, pero el equipo compite y ha mejorado desde la seguridad. Con esa táctica y el empuje de Ayoze, Europa se acerca.