2-1: Empeñado en bajar

Lucas Haurie 14/01/2023

El Sevilla, desde una dirigencia paralizada –consejo de administración y dirección deportiva– hasta una plantilla insolvente en todas sus líneas pasando por un entrenador impotente, se ha conjurado para descender a Segunda. Sólo con una afirmación tan estridente puede explicarse el enésimo vodevil de la temporada en el campo del Girona, uno de esos equipos pésimos y pagados de sí mismo por el cuento chino del estilo que son una permanente invitación a destrozarlos si de verdad se va a por ellos. Pero una segunda mitad exasperante, con constantes regalos a los delanteros gerundenses, propició otra derrota y el fin abrupto de ese pequeño calambrazo de optimismo inyectado por los últimos resultados.

No le ahorra nunca el Sevilla su ratito de pánico y vergüenza, alternativamente, a la sufrida parroquia. El inicio en Montilivi, apenas siete u ocho minutos, fueron un genuino espanto, una película de terror con ribetes de ópera bufa. El trío de centrales que había dispuesto Sampaoli –Nianzou, Fernando y Badé– competía en ver quién regalaba más balones y en posición más peligrosa a los rivales. Tuvo el Girona tres ocasiones a cual más clara, una parada por Bono a su excompañero Stuani, las otras dos malograda por Romeu e Iván Martín, y apuntaba la tarde a tragedia gorda (apenas aplazada) hasta que el fútbol dio uno de esas piruetas que lo convierten en indescifrable.

Jesús Navas fue derribado junto al banquillo local la primera vez, literalmente, que el Sevilla traspasaba el centro del campo. La falta la colgó Rakitic con una comba formidable desde tan lejanísima posición y Nianzou, que hasta entonces parecía un alevín asustado, emergió con un salto enorme para amartillar con su cabeza al fondo de la portería. Pocas veces una ventaja ha sido adquirida tan en contra del curso del juego pero, con tan a menudo ocurre, el gol serenó al ganador momentáneo y desanimó al Girona, que dejó que la primera mitad se le fuese sin demasiada amenaza de empate. Al contrario, un par de tiros de Fernando y Rafa Mir asustaron a Gazzaniga.

Ni siquiera esa media hora de viento favorable le sirvió para serenarse al Sevilla, que volvió a las andadas nada más reanudarse el choque. Salió del vestuario un equipo cobardón y acoquinado que pedía a gritos la remontada, dolorosa a ser posible. Y obtuvo su justa recompensa. Antes del minuto, un cruce lamentable de Joan Jordán, que se tiró al vacío con toda la ventaja para despejar y dejó a solo a Toni Villa en posición de centro, la facilitó el empate a Stuani. Sampaoli quiso que sus futbolistas reaccionaran al empate porque el Girona, sencillamente, no defendía. Pero el intento por marcar el segundo gol fue un puro ejercicio incapacidad ofensiva, de modo que con el paso de los minutos retomaron el tiki-taka ramplón y de alto riesgo.

Gudelj obsequió a Stuani con el 2-1 que el delantero uruguayo perdonó a puerta vacía el exsevillista Bernardo le puso a Suso la pelota del 1-2 que el gaditano desperdició con un pase inocente a Rafa Mir, cuyo tiro se fue a las nubes. El partido era circense para el espectador neutral y de infarto para los hinchas implicados, porque ambas defensas competían en dar facilidades a los romos atacantes del rival. Al final, fue Nianzou quien se coronó, en dura pugna con otros muchos, como el peor del partido. La enésima pérdida en campo propio, ante Valeri, permitió a Yangel Herrera batir a Bono con una vaselina sutil y decidir el partido. Quién sabe si también la suerte, negra, de un Sevilla que hoy no tiene más argumentos que la intervención sobrenatural para evitar el segundazo.

Ficha técnica:

Girona FC: Gazzaniga; Arnau, Santi Bueno, David López (Bernardo, min. 63), Miguel; Romeu; Toni Villa (Yan Couto, min. 62), Iván Martín (Herrera, min. 62), Aleix García, Riquelme (Valery, min. 82); Stuani (Ramon Terrats, min. 90+1).

Sevilla FC: Bono; Jesús Navas (Suso, min. 80), Nianzou, Fernando (Erik Lamela, min. 66), Badé (Gonzalo Montiel, min. 66), Acuña; Jordán, Gudelj; Óliver Torres (Youssef En-Nesyri, min. 90), Ivan Rakitic; y Rafa Mir.

Goles: 1-0, min. 13: Nianzou. 1-1, min. 46: Stuani. 2-1, min. 88: Herrera.

Árbitro: Pizarro Gómez (comité madrileño). Amonestó a los locales David López (min. 36), Toni Villa (min. 45) y Arnau (min. 68) y al visitante Acuña (min. 45).

Incidencias: Partido de la decimoséptima jornada de LaLiga Santander, disputado en el Estadi Municipal de Montilivi ante 12.035 aficionados.