
El futuro del Sevilla se decide en los juzgados
![]() Miguel Ángel Chazarri 20/11/2023 |
No es este martes 21 de noviembre un martes cualquiera. La agenda del Sevilla está apretada. A las 13.00 horas, Joaquín Caparrós recoge su merecido Banquillo de Oro. Sin embargo, lo más importante llegará antes. Desde las 10.00 horas, José María del Nido Benavente y el grupo de Castro/Del Nido Carrasco se citan en el Mercantil número 2 para dilucidar si le conceden las medidas cautelares a Del Nido padre con el objetivo de que pueda votar con la totalidad de sus acciones en la Junta del día 4 de diciembre.
Todos valoran el momento con gran optimismo. En Del Nido Benavente, no es novedad. Siempre dice que va a ganar. Ahora, también. "El día 5 de diciembre volveré a la presidencia del Sevilla FC", ha proclamado en varias entrevistas. El exmáximo mandatario considera que negarle el derecho a voto sigue siendo una tropelía jurídica, de ahí que constantemente solicite las cautelares. Por el momento, ha pinchado en hueso, quedándole únicamente la vía del ruido ante los malos resultados deportivos y económicos de las dos últimas temporadas. También ha torpedeado la normal gestión del club. De hecho es a lo único que se dedica en los últimos años. El proyecto del nuevo Sánchez-Pizjuán, por ejemplo, quedará en el aire.
La parte de Castro sigue igual de confiada que siempre. Hasta le quitan importancia a la jornada. No deberían descuidar al enemigo, pertinaz como pocos. Castro y Del Nido Carrasco, junto con las familias Alés y Guijarro, se sienten seguros de que el juez no entrará con una medida tan contundente sobre un caso que precisamente se sigue pleiteando. El pacto privado continúa vigente y si bien desde los juzgados ya se ha dejado claro que Del Nido puede votar, tampoco su señoría ve razones para variar lo firmado por los grandes capitales. Hasta ahora.
Del Nido Benavente no puede votar con la totalidad de sus acciones porque parte las tiene 'depositadas' en el consejo y dichos títulos no pueden ir contra la remoción del órgano rector, en lo que jurídicamente se conoce como el derecho de las minorías. Además, al pegar el portazo, es su hijo quien representa el capital de la familia en el denominado pacto por la pasta. Hasta 2027. Ni que decir tiene que la calma y la seguridad de los contendientes es muy relativa.
Ésta es la realidad de un Sevilla al que por supuesto le afecta tanta tensión accionarial. Resulta complejo trabajar en tales condiciones hasta para el empleado más raso. No se trata de que Ocampos, En-Nesyri o Badé se despisten por el embrollo accionarial, algo que por supuesto no ocurre. Es más bien que tal clima de incertidumbre tarde o temprano conduce a tomar malas decisiones, como viene ocurriendo en el club en las últimas temporadas. Cunde la perturbación, la duda, el error, la inestabilidad, el caos. Y, así, los malos resultados terminan apareciendo. El 'cuanto peor, mejor' siempre fue el gran aliado de Del Nido Benavente. La otra parte se ha defendido como buenamente ha podido en los últimos años. Tiempo atrás, con pulso firme. Ahora, con demasiadas grietas en la gestión.