muchodeporte.com Sevilla FC

28 puntos menos del Sevilla que hace un año y ... '¿quién es Scotta?'

Alejandro Delmás
Alejandro Delmás
21/03/2023

Cabría apelar aquí, en estos tiempos bélicos, a lo que los críticos de Arte (o de Historia; o de Historia del Arte) ya nos argumentan como 'la sonora irrelevancia del pasado'. Esa 'sonora irrelevancia del pasado' puede ser, en efecto, más o menos 'relevante', pero en el caso del Sevilla FC se concreta en una frase como una sentencia, ese '¿Quién es Scotta?', que el propio interesado, Héctor Horacio, 'Gringo' Scotta atribuye nada menos que a Jorge Sampaoli -encima, argentino-, el último entrenador que, hasta hoy ha dirigido al Sevilla en un partido oficial. 

Sólo por resumir, y como 'leitmotiv' de este texto, uno estima que esa penosa 'irrelevancia del pasado' -léase 'ignorancia, simple y llanamente, por no decir 'desprecio'- se alza como una de las grandes razones de que, a día de hoy, el Sevilla 2022/23 haya firmado en 26 jornadas del Campeonato 22/23... 28 puntos menos que en 2021/22, cuando después de otras 26 jornadas, y tras batir al Betis por 2-1 en Nervión, el Sevilla, entonces 'de' Lopetegui, se alzaba en el segundo puesto de la tabla de Primera División, con 54 puntos y a sólo seis del líder, Real Madrid. 

Ante los siete triunfos ligueros en este Campeonato de tantas cuitas, con favor-contra de 29-42, el Sevilla de 2021/22 firmaba... 15 victorias, con balance de 39-18 en goles. Por cierto, el Betis navegaba hace un año en tercer puesto... con 46 puntos, uno más que a día de hoy. Hace un año y tras 26 jornadas, el favor-contra de los verdiblancos era de 48-32, cuando en estos momentos de 2023 se detiene en 34-26. Pero vamos a ello.

En 1975, dato que nos confirma plenamente Diego Borinsky en 'La Nación' hace sólo tres días, Scotta (San Justo, Santa Fe, 27.9.1950, en torno a 1,82 de altura) alcanzó un récord que aún se mantiene vigente en el fútbol argentino: metió 60 goles en un año. Los hizo en 57 partidos. "Sólo unos pocos iluminados en el mundo, encabezados por Lionel Messi, han conseguido superar esa cifra en una temporada", remarca 'La Nación' que, a continuación, y de la mano de Borinsky, realiza una excelente entrevista al llamado 'Gringo', nota periodística en la que Scotta -que fichó por el Sevilla en el verano de 1976- responde a 100 preguntas. 

En la pregunta número 53, Scotta dice literalmente a Borinsky, refiriéndose a una de las veces que ha regresado a Sevilla (donde su nieto, Valentino Fattore Scotta, ya ha debutado con el primer equipo nervionense). Cita textual: "Después de saludar a los muchachos, el encargado de prensa le dijo a Sampaoli: 'Venga maestro, que acá está Scotta, salúdelo'. Y este señor, que no sé bien que dirigió, creo que ganó una Copa en Chile, le contestó: '¿Quíén es Scotta?' Le dije al de prensa que no se hiciera problemas y me fui. La verdad que no me molesta, me da lo mismo, pero me llamó la atención, son cosas que pasan en la vida". Por otra parte, también existe grabación de un saludo bastante amistoso entre Scotta y Sampaoli, con abrazo incluido. Pero esto fue lo que publicó Borinsky de labios del propio Scotta, con fecha 18.3.2023.

Por resumir, y aludiendo a esa 'sonora irrelevancia del pasado', a Scotta se le otorgan 67 goles oficiales en 120 partidos del Sevilla entre 1976 y 1980 (53 en Liga y 14 en Copa), que hoy le hacen el 13º goleador histórico, aunque hasta 2012 llegó a figurar entre los diez primeros. En esas cuatro temporadas, el cañonero santafecino jugó 120 partidos, sobre 176 del equipo entre Liga y Copa, ya que aquel Sevilla no intervino en competiciones europeas. Curiosamente, en esos partidos no se incluyen las tres tumultuosas, inolvidables finales del Trofeo 'Ciudad de Sevilla' ante el Betis (1976, 77, 78), en las que Scotta hizo auténtica historia ante el Betis, con tres goles en esas tres finales, dos de ellos vitales para que el Sevilla alzara el gran trofeo de la ciudad en 1976 y 78, sendos 1-0 ante el 'eterno rival' de Heliópolis.

GOLES, PEGADA... Y CARISMA.- No es fácil que el Sampaoli que tuvo la desdicha -entre muchas otras- de despreciar de ese modo el reluciente, carismático pasado de Scotta con el Sevilla y el sevillismo haya podido apreciar como merece la trayectoria y el carisma se-vi-llis-tas del llamado 'Gringo'. Pero sorprende mucho que ese mismo Sampaoli que en 1975 -año de la gran plusmarca argentina de Scotta- ya cumplía 15 años y se alistaba de 'carrllero' en las categorías inferiores de Newell's desconozca de modo sumario quién fue y es el gran cañonero que en ese mismo 1975 deslumbraba y machacaba redes como puntero de San Lorenzo, junto a 'cracks' como José Rafael Albrecht o el 'Lobo' Fischer. Tales son las relaciones entre la gente de estos tiempos y el pasado.

En Nervión, el carisma de Scotta resultó tan excepcional... como de pegada demoledora para los contrarios. Los sevillistas viejos -o viejos sevillistas- le buscan comparación en la potencia de chut de otro artillero de leyenda: Emilio Pintado (fallecido en 2017). En esas cuatro temporadas, entre 1976 y 1980, Scotta anotó 67 goles oficiales (rozando el 0,6 de media por partido), según la página oficial del Sevilla, que lo relató así cuando, en marzo de 2019, Wissam Ben Yedder subió al décimo puesto histórico de los goleadores de Nervión... ' adelantando al trío que se encontraba empatado a 67 dianas de Scotta, Diéguez y Gameiro', y ésta es cita textual.

Extracto del relato de Scotta a Borinsky en 'La Nación: "Les metí goles a todos, porque me fue realmente muy bien: al Real Madrid, al Barcelona, al Atlético. Pero si tengo que elegir uno, me quedo con el primero, en el 'clásico'. Fue apenas llegué, el Torneo' Ciudad de Sevilla' (N: Final Sevilla-Betis de 1976, Estadio 'Ramón Sánchez-Pizjuán', 1-0, Sevilla). Era un cuadrangular y nos tocó con Cruzeiro. Terminamos 0-0, fuimos a penales y me tocó el último. La cancha llena, con gente adentro hasta la línea de meta, porque antes no se metían en el campo, no cruzaban la línea: estaba la ley de Franco y el que ponía un pie en la cancha, chau, ¿sabés cómo te daban? Metí un bombazo arriba en el penal y pasamos a la final con el Betis. Y en la final, recibí un pase de Rubio, esquivé al arquero y metí el gol del triunfo. 'Ya está hijo, ya está, ya con esto nos has dado la mayor alegría del año'. me decían los hinchas. En el primer clásico de la Liga, en el campo de ellos, fue igual: ganamos 1-0 con gol mío". 

Fechas exactas de esos dos partidos 'de apertura' de fuego de Scotta contra el Betis, 27 de agosto (final del 'Ciudad de Sevilla') y 11 de septiembre de 1976, sabatina nocturna en Heliópolis. Más adelante, Scotta volvería a marcar goles al Betis en el 'mojado' 3-2 liguero del 23.1.1977 en Nervión, trallazo imponente, que 'retumbó' como un impacto de mortero sobre el meta bético Manolo Campos ('me tiré a un sitio por intuición, porque ni vi pasar el balón') y en las finales de los 'Ciudad de Sevilla' de 1977 (3-1, Betis) y 1978; 1-0 para el Sevilla, con llenazo brutal en el 'Ramón Sánchez-Pizjuán'.

ROJO II, ASENSI... Y LAS BARRERAS.- Por buen católico que sea Héctor Scotta -y lo demuestra, habiendo costeado junto a Daniel Bertoni la imaginería de Luis Álvarez Duarte para la efigie del Cristo del Gran Ámor, que hoy se venera en la Catedral de Buenos Aires, todo a instancias del arzobispo Daniel Keegan-... resultaba un martirio o tortura china ponerse en una barrera delante de un tiro libre del 'Gringo', cuando la grada de Nervión coreaba 'Pss, pss, que viene, que viene...', al soniquete de 'La Marcha de Infantes': 'Ya viene Scotta, ya viene Scotta'. 

El Papa Francisco Bergoglio es el socio 88.235 de San Lorenzo de Almagro, Scotta y Bertoni dejaron dentro del Cristo del Buen Amor un pergamino con el escudo del Sevilla... y Héctor Horacio Scotta espera de nuevo a Bergoglio ('un hombre humilde' dice 'Hache Hache' de Francisco) en la misa de los 'cartoneros' en la Catedral de Buenos Aires. Y... lo que la estallaba a las barreras desde el cañón del 'Gringo' era un latigazo monumental al balón, desde un cuadriceps potente y elástico a la vez, todo en gesto de tiro rapidísimo y potentísimo que se consumaba en subida espectacular de la pierna hasta arriba, de modo muy parecido a como hacía el internacional alemán Rainer Bonhof.

De ese sentimiento de miedo, impotencia y frustración de los que se ponían 'en barrera' ante una acometida de Scotta habla mejor que nada la imagen que aquí traemos de un Sevilla-Español (2-1; Scotta, de penalti, y Bertoni), el 30.9.1979, en Nervión. Es suficiente con ver las caras, los gestos y el pánico de los españolistas Amarillo, Arabí y Molinos, pálidos ante el cañonazo del '7', Scotta, como ante un pelotón de fusilamiento; escena que, algo más lejos, observa Daniel Bertoni.

En la misma temporada, 1977-1978, sendas andanadas de Scotta pusieron KO sobre el pasto de Nervión a dos jugadores tan señalados como Rojo II (entonces, en el Racing de Santander) y el barcelonista Juan Manuel Asensi, que habían osado 'desafiar' el disparo del 'Gringo' desde sendas 'barreras'. Así lo narró el propio Héctor Scotta a quien aquí firma, en entrevista telefónica desde Buenos Aires para el Diario 'AS', el 23.3.2013. Inclusive, con sus antecedentes de 'pegador'.

"(Suspira a través del teléfono)... "Creo que eso vino conmigo. Yo tenía un tío en Santa Fe que era muy campesino, muy grande, muy 'gringo'. Dicen que saqué el cuerpo, la fuerza y la pegada de él. Ojalá pudiera ser yo ahora un gringo, allí en esos campos de soja y trigo: pero con la plata de ahora... recuerdo perfectamente lo de Asensi. Fue en el Sánchez-Pizjuán. Venía con el Barcelona, se puso en la barrera para un tiro libre y le alcancé en la boca del estómago. Cayó al suelo y cuando allí le refrescaron y le alzaron la camiseta, me enseñaron y se vio que tenía toda la esfera de la pelota, con los gajos, marcada sobre la boca del estómago. Lo de Rojo II fue un chut que le dio en la cabeza, con el campo embarrado y el balón pesado. Y claro... hubo incluso que cambiarlo en el descanso".

... En las seis jornadas que dirigió al Sevilla 2022/23, hasta que fue despedido, Julen Lopetegui contabilizó cinco puntos a través de una victoria, dos empates y tres derrotas. En otras 20 jornadas, Jorge Sampaoli firma balance de seis victorias, cinco empates y... nueve derrotas que, todo junto, coloca al Sevilla al borde del precipicio, jugando de una manera, cabe decir... 'insensata'. 28 puntos menos que hace un año. Todo ha sido, sí, un brindis a la 'sonora irrelevancia del pasado', en la que también se adentra el inusitado patetismo de los huesos a la vista y al aire libre en el Cementerio de Sevilla. 

¿Quién es Scotta? Pues 'todo esto' era y es Héctor Horacio Scotta. Lo sabemos quienes escuchamos y recordamos aquella 'Marcha de Infantes' en Nervion, entre un eco como de mortero, el 'boom' de cañón del 'Gringo'.