Vuelven los malos síntomas del Sevilla: los cambios, encontronazo jugador-entrenador y menos fútbol

I.Cáceres Dastis 18/03/2024

El Sevilla FC tiene este lunes una Junta de Accionistas Extraordinaria (sí, otra más), en la que no se esperan grandes cambios. Sin embargo, la asamblea vuelve a llegar después de un mal encuentro del equipo y una derrota, merecida, que da cierta intranquilidad al club. El descenso vuelve a ser un riesgo real.

El caso es que el Sevilla viene de puntuar en Almería (debió haber ganado), y perder contra el Celta, con malos síntomas de fútbol y un encontronazo entre Quique Flores y En-Nesyri que dejó una energía extraña en el área técnica. Si analizamos la leve caída que está experimentando el equipo de Quique Flores, podemos rescatar varias cosas.

Concede demasiado

La supuesta seguridad defensiva que había conseguido hasta antes del partido del Almería se ha perdido en dos encuentros. O bien el problema es el centro del campo que no sostiene lo que debiera, o el papel de los centrales del Sevilla ha venido a menos. Está claro que ante el Almería y el Celta hubo fallos defensivos claros en las marcas. Uno de Ocampos y otro de Kike Salas. Además, el cuadro hispalense fue dominado claramente, sobre todo este pasado domingo frente al cuadro celeste.

Gestión del banquillo

Los cambios de Quique Flores y los planteamientos de los últimos partidos no han sido los correctos. Tramos de colocar el autobús detrás y cambios erráticos. Uno de ellos, el de En-Nesyri ante el Celta, no sólo fue negativo para el equipo sino que además despierta en el goleador marroquí del Sevilla cabreo. Enfado porque el delantero percibe que Isaac, a pesar de estar más cansado, ha permanecido en el campo mientras él se iba al banquillo, y que al entrenador le gusta, o parece que le gusta, la pareja Lukebakio-Isaac. Quique acertó en llamar la atención de En-Nesyri en el banquillo, pero si lo hubiera dejado pasar y lo gestiona interiormente tampoco hubiera pasado nada.

Desacierto de Isaac Romero

Se puede criticar poco o nada al chaval. No obstante, en los dos últimos partidos no ha convertido varias ocasiones claras y ante el Celta fue algo egoísta en una buena llegada en la segunda parte. Si tiene ocasiones es que sigue a buen nivel, pero en el momento que Isaac flaquea en esta vertiente, el equipo lo nota.