1ª División (2016/2017) > Jornada 21

Faltó el gol del de siempre

El Betis debió ganar al Valencia. No porque en el juego ofreciera imagen de superioridad, pero sí por las ocasiones generadas, algunas de ellas muy claras. El equipo de Víctor se siente mejor en casa. Juega más animado, dentro de sus lagunas habituales, que también las sigue habiendo. Normalmente hay un hombre, Rubén Castro, que suele acudir puntual a la cita con el gol. Esta vez falló y seco Rubén, seco el Betis. Por una simple cuestión de puntería se escapó la victoria. De haber acertado con el descabello, este triste Valencia hubiera sido laminado en el Villamarín.

El Valencia salió con el ánimo de enfriar todo lo posible al Betis. Al ritmo de Parejo, jugó el equipo de Voro con gusto. Buenos apoyos, buenos movimientos, buenos pases. Todos cerca del balón. El Betis corría tratando de, primero, recuperar, para luego buscar a Dani Ceballos. Desprendió mejores sensaciones el Valencia, entre otras cosas porque cuenta con futbolistas de mayor calidad. Con todo, no se puede decir que no hubiera actividad en el área de Diego Alves. Posiblemente las ocasiones más claras fueron del Betis. Un tiro al larguero de Rubén Castro, un remate flojo de Álex Alegría salvado en la línea de gol por Mario y un par de amagos de disparo de Rubén Castro buscando el hueco para tirar. En otro tiempo, hubiera engatillado alguna el canario. Entre quiebro y quiebro, los defensas del Valencia terminaron encimándole. Claro que el Valencia también inquietó lo suyo. Para empezar, no le pitaron un penalti claro cometido por Pezzella a tiro de Montoya. Algún que otro centro enérgico sembró la duda en Adán y la defensa. Todo muy igualado, pendiente de ese instante de acierto en el área contraria necesario para comenzar a romper un partido. En el Valencia, clínic de fútbol con criterio de Parejo. En el Betis, Dani Ceballos sigue demostrando que ahora mismo es medio equipo. También bastante activo Durmisi por la izquierda.

El descanso le sentó mejor al Betis que al Valencia. Andan los de Voro con los clásicos síntomas del equipo que quiere salvar el año como sea. Tuvo tanta inseguridad como inocencia en los metros finales, donde fue una calamidad. El Betis mejoró con respecto a lo visto en el primer tiempo. Las ocasiones se sucedieron. Un lanzamiento intencionado de Rubén Pardo, un tiro al palo de Petros y especialmente un remate de Rubén Castro tras saque de falta, que extrañamente salió de su bota flojo, fácil para el despeje de Diego Alves. Conforme pasaron los minutos, el Betis fue bajando el pistón, hasta el punto de que la recta final se jugó al ritmo de Parejo. La portería de Adán, no obstante, estaba a salvo, pues el Valencia era una máquina de fallar cuando se acercaba al área. Los cambios de Víctor, lógicos, tampoco cambiaron nada. Sanabria salió muy desconectado y Jonas Martin pasó desapercibido. Con el Valencia firmando el punto y el Betis intentándolo cada vez con menos fe, cayó el 0-0. En este plan, sólo queda el derbi como objetivo. Algo triste, pero es lo que hay.

Real Betis (0): Adán; Piccini, Mandi, Pezzella, Tosca, Durmisi; Petros (Jonas, min. 73), Rubén Pardo, Dani Ceballos; Álex Alegría (Sanabria, min. 73) y Rubén Castro.

Valencia CF (0): Diego Alves; Montoya, Aderlan (Abdennour, min. 56), Mangala, Gayá; Parejo, Mario Suárez; Munir, Orellana (Cancelo, min. 80), Nani; y Santi Mina (Zaza, min. 64).

Árbitro: Daniel Jesús Trujillo Suárez (Comité Canario). Amonestó a los locales Mandi, Sanabria, Dani Ceballos y Pezzella; y a los visitantes Aderlan, Parejo y Zaza.

Durmisi

Sus incorporaciones inquietaron al Valencia. De largo, el mejor fichaje de Torrecilla.